sábado, 28 de mayo de 2011

Una de las mejores líneas de Lorca es “agonía, siempre agonía...con los zapatos llenos de sangre...esos relojes cayendo sobre mí, bailando durante décadas sobre vasos de vino rotos: ¡¡¿Donde esta mi Gólgota?!!

Alex, me llamo Alex. Hay momentos, y lo puedo corroborar, en que no hace falta comer, el dolor del estomago se puede solapar fácilmente con un par de marcas nuevas en el antebrazo. Fui al Términus, un local cerca de la loma sur. Me divierte el baile de cortejo ajeno, heridas simultáneas en la mente que dejan un brillo especial en la mirada. No iba a eso, no me gusta ser infiel a Daisy, mi muñeca hinchable preferida, algo que no aparece en los libros de historia cuando se habla de la segunda guerra mundial. 

Siempre que estoy muy bebido como es el caso, hay una lucha de poder, una necesidad de destrozar algo, montar un escándalo, bajarme los pantalones y enseñar mi polla mientras grito que no somos animales…
…la puta heteronomía de la voluntad, no se puede hacer las cosas con libertad sin a la vez basarse en normas impuestas por otras personas, a las cuales, en estas circunstancias, se debe obedecer; no se trata de una moralidad que no tengo, es una inclinación a sentirme aceptado que me hacen plegarme a las exigencias que impone el mundo. La única solución sería hacer uso de una voluntad de poder de la que carezco. O sea que de momento mi hermosa polla se queda dentro de mis pantalones…
Saco un libro, es mi coartada, pero al cabo de media hora me resulta lesivo el puto autor. Hago una pequeña fogata con el encima de una mesa. Nadie se molesta, en el Términus todo esta permitido. Solo me llamaron la atención cuando compartí a mi novia en un reservado, y solo porque ella gritaba demasiado.
Puedes macerar un texto con citas clásicas o modas supinas, pero sino te dejas las vísceras, sino te emocionas a ti mismo escribiendo no sirve de nada. Un puto arrebato de sinceridad, como mínimo eso, sino solo es un aborto, escritos tantálicos que provocan dolor en el autor, y una capacidad insalubre para dejar insatisfecho al lector. Es así, y se sabe. Por muchos comentarios o críticas favorables, una mentira mil veces repetida sigue siendo una mentira.

Ella ha sido terriblemente condescendiente, apago el teléfono. Joder, ¿porque coño tengo móvil? Fue el principio del fin.

El Dj ha tenido un puto derrame cerebral e insiste con el mismo tema una y otra vez, la gente ni siquiera se inquieta pero me siento raro. Una extraña pareja se va, debería hacer lo mismo. Pido dos botellas de Absolut Vodka para llevar, cojo un taxi y me voy a casa. Salir no me gusta, no me gusta mover mi andrajoso cuerpo de aquí para allá sin ningún sentido. Tengo la necesidad de cortarme de nuevo, de sentir el vodka trasegando mis heridas.

Llego a casa y pongo algo de música, hay un olor nauseabundo viniendo de la cocina. Enciendo el ordenador, y escribo sobre Ella. Vislumbro el espejo y todo lo vivido se empoza de nuevo como un charco de culpa en la mirada. Encuentro algo de zumo de tomate caducado para este vodka azul y lo derramo en una copa holocáustica de bordes asesinos.
Pienso en cámaras de gas y carne muerta para animarme, la noche acaba de empezar…
Enciendo el móvil: varias llamadas perdidas con olor a prestado. Devuelvo la llamada:

-Mi madre tiene un bulto, le quieren hacer una biopsia...estoy muy asustada...
-Bueno, a veces es bueno saber la fecha en que te debes despedir de alguien.
-Eres un desgraciado ¿es lo único que puedes decirme?
-¿Quedamos para echar un polvo?
Me insulta durante varios minutos y cuelga. Ya no lloraba. El odio es más poderoso que la compasión. Algún día me lo agradecerá.

Apago el móvil.

Pienso en tus labios, ese brevísimo pañuelo de sangre, siempre embriagado por la crueldad de la despedida. Esas piernas ebúrneas –de marfil-, tu voz como una puta aria olvidada que aun se deja sentir. Siempre había un rumor agorero de crespón en todas las canciones que compartimos.
Observo la luna muriendo, esa curva de guadaña. Melancolía, mi vieja amiga, bésame en los labios, tú, que tienes nombre de mujer. ¿Dónde esta mi lugar, dónde esta mi hospicio? Acerquémonos a ese borde frágil de lilas podridas de cementerio, no utilices tus lágrimas afiladas para cortarte de nuevo, restaña el dolor, deja que este hilo de infinito seque la amargura entre los dos.

Estas sombras de féretro rodeándome. Me sirvo otra copa, alma de alfeñique, sin guerra, sin paz. Supongo que estoy triste por Chacon, ese discurso almibarado sobre su adolescencia, la libertad y fraternidad, alcanzar el futuro con fuerza pero también con generosidad. Me ha emocionado, últimamente me emociono fácilmente. También puede ser porque es catalana, y después del cambio de ciclo con Rubalcaba quemado por la derrota electoral puede que tenga posibilidades de ser presidenta. Eso me pone cachondo. Esa inteligencia emocional para manipular. Conozco pocas mujeres inteligentes.
Por cierto, en Sol hay un taller de masaje y osteopatía y un taller para construir cocinas solares. Joder, con la revolución, estamos viviendo un momento histórico de cambio y ni me entero...Je…je…je. Triste.

Pero sigamos…

Un minuto horizontal, el tiempo que tardas en leer esto, como una vena estallando en la esclerótica provocando un eclipse granate de tedio estatual, coágulos venenosos de sombras en tu alma puesta en alquiler. Bienvenidos a mi cantar neurasténico decadente entre fosforescencias de asco carnal. Yerto o Yermo que mas da…

Llamo a alguien. Salta el contestador. Quizá es un poco tarde. Quizá esta en sol follando con una pancarta.

A: “Una de las mejores líneas de Lorca es “agonía, siempre agonía…”piensa en ello cuando mates una cucaracha, cuando sostengas la navaja de afeitar a punto de enfrentarte a otro día más. Eso pensaba Bukowski al menos…
Estoy rodeado de paredes que blanden sonrisas de despedida, los dioses vomitan a mi alrededor. Vuelve, prometo no embrutecerte, sabes que escribo bien a pesar de ser una persona extremadamente despreciable…”

Espero unos segundos y lo vuelvo a apagar.

Hay miles de ojos de sangre en el suelo. A veces pienso en el gas como amante, besándome dormido, recorriendo todo mi cuerpo con su aliento, haciéndome olvidar, una bala con forma de corazón. Alguien enciende un cigarro en una casa adyacente y de pronto todo estalla. Ventanas violando con sus cristales las caras de la gente, paredes deshaciéndose como arena húmeda, esa llama púrpura inundándolo todo. Una primera sonrisa.

Luego pienso en toda esa gente sentada en una plaza esperando a que todo acabe, sin amar ni ser amados, sin recordar como era follar con algo de pasión. Arrastrando los pies por supermercados comprando cosas, miradas tísicas, sin dotar a sus actos de ningún significado. Absortos en la nada, sueños llenos de polvo en un vertedero de palabras.
Como desvestir con besos histéricos y solo encontrar un amor con ojeras de muerte y aliento deicida.
Siempre me quedara la transubstanciación de tu cuerpo y tus flujos en maná/soma imperecedero.

Arecibo (Long Distance Calling) by Long Distance Calling on Grooveshark

lunes, 23 de mayo de 2011

Te aprovechaste de mi estupidez como con todos, todos los demás ¿Acaso querías algo más? Tengo tu marca. Querías eso, nada más…

“T’estimo simplement per tot allò que no t’hauria d’estimar.”

…son las 04:43. Quizás sea el insomnio, o simplemente solo sé vivir de noche. Aún recuerdo nuestra última conversación, más de tres horas repletas de anhelos, evocaciones e interrogantes –míos, nunca tuyos. Hubo un momento en que lloraste, y no querías explicarme el motivo, ¿pensabas en otro, o era la desesperanza de tenerme y no desearme lo que te hacía llorar? Inventaba cuentos, a pesar de todo, escenarios románticos donde la dependencia de un T’estimo fuera algo de lo que sentirme orgulloso.

Echo de menos como te esforzabas en buscar la trascendencia en las cosas más inverosímiles, echo de menos tu ciclotímica incoherencia, como pintabas mis horas de lluvia con el ámbar intenso de tus ojos, echo de menos tu sonrisa de hilo de plata y ensoñarme abrazado con el recuerdo de tu voz.

Volví a escuchar nuestra canción favorita, pero no tuvo el mismo efecto sobre mí. Y me permití dudar durante unos segundos, despotricar hacía la pared malhumorado, queriendo convencerme de que la culpa era de la canción por haber agotado tan pronto su capacidad para emocionarme. Huía con torpeza de la obviedad, como quien olvida los rasgos de un familiar lejano y echa la culpa a la falta de fotografías.

A fin de cuentas todo es como una película porno en versión original, dos charcos de carne caliente nadando en un minibar. Nos sodomizan los tópicos, ¿nos cuesta lo mismo implicarnos en trabajos absurdos que en sentimientos absurdos? Leo en una pequeña esquina del periódico que cuatro millones de mariposas han muerto en una nevada. Quemo tus cartas, y es como besar, con las venas llenas de barro, el recuerdo de tus pisadas sobre el asfalto de mi necesidad.

Es un gesto romántico lo de quemar, arrugar el papel, aliviar nuestra frustración o la falta de talento arrojando a la basura las últimas páginas redactadas ante la máquina de escribir, tachando con tinta los restos del naufragio emocional que no quieres compartir. A fin de cuentas el acto de escribir es un acto de pura soledad, ¿qué hemos pretendido haciéndolo público?
El soporte de la música son las partituras, el del cine el celuloide, de las demás artes, los lienzos, la piedra, la madera, la arcilla, los metales… sin embargo los blogs están alejados de la imprenta, son algo virtual, efímero en su propia concepción, buscan el día a día hasta que desaparecen, agotados en ambas direcciones. Son el reloj en el pasillo de la muerte, una relación, una lucidez que se va agotando desde la primera frase de bienvenida, un libro del que no sabes el número de páginas. Y quizás ahí tienen su verdadera lógica y triunfo.

Ahora, cuando odias tus párrafos, solo tienes que apretar un botón y vuelve la página en blanco, no hay cenizas, ni olor, ni marcas, es un gesto inocuo, casi infantil, como el de esa mujer que promete que nunca conseguirá olvidarte y luego, más tarde, empieza a mutilarte con aséptica afectación.

Bitter Branches by PJ Harvey on Grooveshark

viernes, 20 de mayo de 2011

A veces me cuesta más escribir un buen titulo que el post en si mismo.

Atentado contra la razón. Escenario: Rorschach, Israel. Vecinos. Les separa un tabique a través del cual hablan.

Israel: ¿Qué tiene tres agujeros y es más inteligente que tú?
Rorschach: ¿Sabes? Desde aquella conversación sobre filias me replanteo seguir hablando contigo, eres como un accidente de carretera: al final reduces la velocidad y tienes pesadillas toda la noche.
Israel:  Intento abrir nuevos caminos para tu gozoso onanismo, dado que estas tan alejado de las vaginas como de un trabajo digno.
Rorschach: Ese vídeo con una séxtuple penetración fue asqueroso.
Israel:  Lo interesante era ver como se colocaban los hombres, era un puto puzzle. El director es un genio.
Rorschach: Tienes los ojos inyectados en semen, deja de chatear en el canal #mazmorra, un poco de fortaleza emocional, busca humanidad para variar, no solo carne de muestrario.
Israel: Me gustan los vídeos inclasificables como tesis de la infinita degeneración humana, mi vocación ante la pornografía es una forma de rebelarme ante la facilidad de la mujer para elegir compañeros acomodaticios.
Rorschach: Puro resentimiento entonces.
Israel:  No es resentimiento, realmente el poder se lo da la naturaleza, la propia pulsión genética, sería como si el protagonista de un libro se quejase de su amargo destino, sin darse cuenta que es el pago por existir.

Rorschach: Deberíamos ir a Sol, comprar un helado a los manifestantes. Me emociono cuando veo tanta gente unida.
Israel:  La indignación por si sola no tiene ningún sentido, hay que enfocarla en algo, no solo en proclamas. Veo mas sentido en una orgia: hay una finalidad, un fin claro y concreto. Incluso para el mirón. Es muy bonito todo esto, como globos de colores ascendiendo hacía el cielo. Pero el deja vu, la sensación interior, es la de estar un fin de año sin nada mejor que hacer que ver una película porno con tus amigos. Hay elementos de éxito, pero es como una deflagración en el espacio: el globo, aunque no lo veas, no sube eternamente y al final cae deshinchado. 
Rorschach:¿Entonces tú no va a votar a ningún partido minoritario?
Israel: Nunca te lo conté pero hace un par de años estuve a punto de suicidarme por una mujer…
Rorschach:¿De verdad? Nunca pensaría que fuer…
Israel: ¡No me interrumpas! La introspección llama a tu puerta, pero solo dura unos instantes. Sí, casi lo hago. Creo que estaba enamorado. Una obsesión punzante, desgarradora. Pero la solución fue encontrar otra obsesión.
Rorschach: Tus vídeos…
Israel:  ¡Si! No me gusta que los desprecies con tu tono, gracias a ellos estoy vivo. Concentro en ellos todas mis obsesiones, creo un producto y finalmente lo disfruto. Una metáfora de la vida. Una metáfora del amor.
Rorschach: Simplemente te dedicas a editar películas porno, a hacer vídeos de cuatro horas con las mejores escenas, ¿consideras que eso es la vida?
Israel:  La vida es una obsesión, da igual si es ficticia o no. La sociedad nos quiere frustrados, la publicidad es nuestro ternero de oro. El amor es una simple ecuación química que nos empuja unos contra otros atravesando puertas de soledad y lujuria. No tiene nada de malo aislarse, no tiene nada de malo controlar tu placer, tu obsesión, tu tiempo. Sin perpetuación, sin impulsos eléctricos nuestro legado es nulo, pasto de gusanos de cementerio. Y, si por desgracia consigues lo que quieres, inmediatamente dejará de importante, la variable es el miedo a perderlo ¿Quieres tener a una persona atada a ti?
Evita las trampas económicas, la descendencia, el matrimonio. Evita la seguridad de la posesión. Decir “Te amo” es el principio del final, es como comenzar un libro. El misterio, la elección sobre otros, la erótica del placer aplazado, todo esto se desgasta ya en la primera página. Puedes anotarlo, releerlo, pero nunca será como la primera vez. Agotado.

Rorschach: Pero si lo tienes tan claro no entiendo porque solo dedicas tu vida a…
Israel:  ¡Cállate! Estoy abriendo mi corazón no necesito replicas. Estos videos, como dirian Velvet Underground en Heroin,“it’s my wife and it’s my life”. Soy demasiado cobarde para otra opción. Al final solo se trata de sobrevivir. El amor es una espera decepcionada. Me aburro a mi mismo, me voy, aun tengo que grabar todas las descargas, seleccionar material y editar al menos media hora de buena calidad. Ya te pasaré el nuevo material. Hay un video de una chica asiática. Lágrimas, semen y maquillaje deslizándose por un rostro prometedor, con esa bola con mordaza en su boca que le impide hablar. Sus ojos lo expresan todo. Su cuerpo violentado por crucifijos en forma de consolador, las cuentas de rosario convertidos en bolas chinas que se han introduciendo una a una sin piedad. Esta contra la pared, con la espalda arqueada, solo lleva unos zapatos rojos de tacón de aguja y se la ve nerviosa, esta esperando. De pronto aparece él, lleva una fusta y…
Rorschach: ¡Por Dios santo!, ¡Para! Aun espero tener una vida sexual normal. Yo también me voy, bajaré a Madrid. Ya hablaremos en otro momento…
Israel: Esta bien, tú te lo pierdes, ahora venía lo mejor. Ya seguiremos….

Something in the Way by Nirvana on Grooveshark

miércoles, 18 de mayo de 2011

Paraísos perdidos

¿Lo he superado ya?, ¿he dejado de estar obsesionado con ella?
Quizá me siguen dando miedo las mujeres y alargo este luto escribiendo exabruptos exaltados, botellas llenas de ensueño que se rompen antes de llegar al destinatario en este vertedero de puntos suspensivos.
Te pido ayuda, mi querida anónima, me gustaría provocarte un eclipse de conciencia -no sé si con este u otro texto-, y robar una mentira de tus dedos, un te quiero virtual, residual, dirigido a mi corazón.

Siempre hay recompensa por encender el fósforo de mi alma, combinaría esa ausencia de frio con la bola curva de inmoralidad que trazan mis dedos y mi lengua sobre tu cuerpo. Nos haría disfrutar del color sinestésico de tus gemidos mientras bebo el maná de tu clítoris enajenado. Convertirme en tu heroína, en ese síndrome de abstinencia que te humedece cuando escuchas mis pasos. Y naufragaría en ti mientras tu coño palpitante me ahoga resbalando por mi cuerpo en una lluvia de orgasmo.
Tendríamos tiempo de poner a Satie y disfrutar del olor petricor de tu lencería, del Paris en miniatura que hay entre tus piernas.

Puedo eyacular en tu cara con romanticismo si tú sobrellevas la carga de mis fantasías, solo tienes que poseer inteligencia y cierto disgusto existencial que te empuje a violar con saña el presente, a pensar solo en el ahora y nunca en el después.

Sí, muchacha dubitativa, atrévete…¿Por qué no?

Paraísos Perdidos by Iván Ferreiro on Grooveshark

lunes, 16 de mayo de 2011

¿Por qué solo nos acordamos de las mujeres que nos rechazan?

Se llama X, obeso, ojos vulgares de miope, joven. Le duelen las rodillas. Trabaja de noche, encargado de aparcamiento. Cerca de discoteca. Burlas y chistes. Es un romántico. Su ulcera también. La única opción es aceptarse.
Tiene pocos amigos todos casados o con hijos. Le deprime quedar con ellos. Él solo ha tenido una novia. Pero aquello terminó. Hace mucho tiempo. A veces, con ánimo masoquista, deshilacha los recuerdos de ese amor de vertedero.

Pasan las horas inclementes de trabajo, ojeras del alma. Piensa en su vecina. Piensa en su blog. Piensa en sus seguidores.
Piensa de nuevo en su vecina: un cuerpo increíble, alta, esbelta, pelo largo castaño, siempre vestida con algo de color rojo, ya sea una cinta, la falda, un anillo e incluso –esta seguro de ello- su ropa interior. Coinciden cuando él regresa del trabajo y ella, con sonido de tacones exhaustos, de un mundo diferente al suyo. El pelo revuelto. Ojos opacos. Siempre sola. Nunca conversan. Simplemente se miran, como en un espejo en el que no terminan de reconocerse. A veces varios días seguidos, otras veces pasan semanas sin ningún encuentro. Esta enamorado de ella.

El señor X deja de pensar en ello. Tiene otro mundo, más sencillo, en el que jugar. Abre el portátil. Redacta un post. Plagia a Benedetti. Lee poesía. Regurgita mezcolanzas de suspiros y desvelos. Surte efecto. Se siente como un cantante con bragas y sujetadores alrededor. Una vez quedó con una de ellas. La cita fue breve, le miraba como un cervatillo asustado, entre la suplica y la decepción. Esperaba otra cosa. Esperaba su fantasía. Él es real. Sus kilos son reales, su sudor, su pequeño pene, el vello de su espalda, sus manos de mujer. Tuvo que cambiar de blog. Empezar de nuevo.

Ahora nunca queda. Solo conversaciones por teléfono. Un estimulante sexual. Carne buscando carne, ¿alguien mira más allá de la grasa? No les culpa.
La única del blog con la que realmente ha intimidado es con Erin. Hablan de la soledad. De que nadie les ha enseñado a vivir. No hay sublimación ni artificio en como escribe ella, solo depresión y daños cerebrales. Erin esta obsesionada con alguien de su entorno, pero tiene miedo al rechazo. Nunca han hablado de quedar o verse en persona. X tiene fantasías, pero no se deja llevar.

Pasan los meses y la frustración le empieza a dominar. No recuerda el tacto de una vagina. La decadencia hace acto de presencia. Muñecas hinchables. Se subscribe a paginas de porno duro. Amor entre especies. La masturbación del cenobita.
Ya no hay poesía en sus post. Misoginia. Ellas pueden elegir, ¿Por qué él no? Pierde el contacto, no contesta ningún correo. Colecciona botellas de vino barato. Recorre las alcantarillas del mundo exterior. Conoce a putas, rescata rechazos en locales agrios, con mujeres arrugadas y borrachas. El romántico es despedazado por las ratas. Un buen festín.

Una noche vuelve borracho, con el alma aguada de malas experiencias. Se tambalea frente a la escalera, finalmente se rinde y se deja caer. De pronto un sonido: su vecina, zapatos rojos de aguja disolviéndose tras ella. Se para de improviso al verle y no puede evitar hacer una mueca. Todo el resentimiento explota en él, se levanta con furia, la empuja contra la pared, la manosea, la obliga a abrirse de piernas, destroza su ropa. Palabras, imágenes sucias muerden su aliento cuando intenta penetrarla. Pero no puede hacerlo, así no. Balbucea unas palabras de disculpa y la suelta. Ella se gira lentamente, un llanto seco le atraviesa la expresión. Recompone su ropa y se queda unos instantes que parecen eternos delante de él, mirándole fijamente, como si observara un insecto, una grieta en la pared. Luego desaparece sin decir nada.

Pasan unos días. No hay denuncia. Pregunta por ella. Se ha mudado. Nadie sabe donde. Se obsesiona. Deja de comer. No consigue olvidar esa mirada. Cae en una depresión y pide una excedencia. Se aísla más. No habla con nadie. Su familia se preocupa pero no hace nada.

Vuelve a hablar con Erin. Llevaban meses sin contacto. Ella le cuenta que su historia tuvo un final fatídico. Esta destrozada, tiene miedo a enamorarse de nuevo, nunca pensó que pudieran hacerle tanto daño. Cada uno a su manera ha perdido el amor de su vida. Sienten empatía por el dolor del otro y no ahondan en detalles.
Pasa un tiempo. Hay más risas y menos dolor. Al final, por pura evocación, algo intangible empieza a despertar entre sus soledades, algo que busca ser correspondido. Lentamente, con miedo, cada uno va dando pequeños pasos hasta poder reconocer sus sentimientos. Aun no se han visto, ni siquiera en foto, su comunicación ha sido solo por mails y llamadas telefónicas. Deciden quedar en un restaurante en el centro y darse una oportunidad.

X llega antes. Esta nervioso. Piensa en ella, en su fragilidad. Es posible enamorarse llenando los huecos de un cuerpo con las palabras de un párrafo sincero, visceral, que conecta contigo directamente, que te alimenta de emoción, que te excita, te violenta. Es posible que una voz te haga temblar, te seque la boca y se convierta en el centro de tu mundo, con todos tus sentidos atentos a cada matiz, cada inflexión. Es posible enamorarse así, como también es posible enamorarse solo de un cuerpo y no saber nada de esa persona.

X escucha unos tacones acercándose al reservado y antes de alzar la vista lo sabe. Algunas personas, lo merezcan o no, nunca tendrán un final feliz.

Where the Streets Have No Name by U2 on Grooveshark

miércoles, 11 de mayo de 2011

El frío, esa negación simbólica del hogar, provoca rigidez en tus brazos sujetando el volante, en ese pie huérfano que pisa con más fuerza el acelerador.

Escribir no es fácil. Escribir algo que realmente merezca la pena tampoco. Pero hay un momento en que las palabras fluyen, tienes una idea, consigues abstraerte de todo, la imaginación se arremolina en el sentido contrario de las agujas del reloj y tus dedos crean magia. Una magia personal, ineludible. No hablamos de talento, tampoco de sinceridad. Es una cuestión de perspectiva, a ti te agrada y con eso basta, porque a fin de cuentas es como tu propia vida, un adocenamiento colectivo, millones de seres caminando hacia las cámaras de gas, sin saber que hacer con su tiempo mientras tanto. Pero al conseguir plasmar parte de esa individualidad que solo tú sientes/comprendes, alcanzas cierto grado de terapéutica inmortalidad y salir del colectivo y/o conseguir un público.

También es un paliativo. Hay mucha gente depresiva, sola, con problemas sentimentales irresolubles que al compartir y conseguir plasmar sus aflicciones se sienten de alguna manera reconfortados. Y en ese proceso de reconciliación personal piensan: “¿Por qué no lo había intentado antes?”

Divago como siempre, toda esta exposición radica en mi curiosidad por saber de vosotros: ¿escribíais antes? ¿Creéis que escribís bien, que habéis encontrado un estilo propio? ¿Es una afición más o queréis hacer algo relacionado con ello en el futuro? ¿Cuánto pensáis que va a durar vuestro blog sin que os aburráis u os repitáis?

Chicago (Con Vetusta Morla) by Christina Rosenvinge on Grooveshark

martes, 10 de mayo de 2011

Textos antiguos.

Todo empezó porque tenía un brillo especial en la mirada. Y claro, YO, no quería estar solo. Estar solo es peligroso, porque sin el calor de una conversación con gente afín las ideas se enquistan y dan lugar a lo erróneo, lo desproporcionado y lo absurdo, aunque también con tacita complacencia al inquietante y original surrealismo.

Ese brillo en la mirada, ¿como poder definirlo?, es el brillo de nuestras creaciones futuras, de nuestras potencialidades llevadas al éxito. Es algo que da carisma al individuo, porque te admira su pasión, su lucha, su talento.
Y aunque la envidia y el rencor florecen con facilidad cuando la impertérrita comparación te aflige con su reflejo en el espejo, alimentas en tu interior la esperanza de que su compañía te engrandezca.

Nostalgia, añoranza, esa melancólica sensación de ausencia, ese incapacidad de desasimiento, ese sumergirte una y otra vez en los recuerdos cada vez más injustos y punzantes del pasado. Decepción tras decepción, nos va anegando poco a poco en la muerte, el olvido, la indiferencia, y miras atrás un día sorprendido, ¿Ame a esa persona?, ¿Lloraba en su ausencia? Fragilidad, ¡oh, que buen nombre de mujer seria!

Pero no sería justo plagiar en tales términos, a fin de cuentas el hombre es igual de vil y superficial, solo cuando seduce y no se excita, cuando una cena romántica no es un peaje para la cama, cuando un beso ruboriza y una caricia significa solo ternura, viven felices los románticos ajenos a la realidad que les rodea.

Efímero es una palabra mucho más poderosa que eterno, porque cosas eternas hay muy pocas, y casi siempre son las mismas. A veces el tiempo se enfada con las cosas eternas y a despecho de nuestra mente, castradora de un canon especifico de realidad, las cambia, las posee, y finalmente las destruye.
Sin embargo las cosas efímeras son muy numerosas, su valor reside en su fugacidad, en la brevedad del tiempo que nos prestan. 


Esto nos hace entender que las mejores cosas de la vida son las que reúnen estos dos valores, uno de ellos, como bien has tenido en cuenta tú antes, es el amor.
El amor es efímero porque es frágil, voluble, caprichoso, y también es eterno, porque muchas veces con dedicación es capaz de superar las limitaciones de quienes proclaman su consigna en la soledad de un orgasmo compartido.


Todo se puede ver desde muchas perspectivas, pongamos el ejemplo de una pareja: él esta masturbando a su amada, cualquiera podría pensar que es un acto de generosidad, en el cual se despreocupa de su propio placer mientras disfruta del de su pareja.


Pero hay algo más, el placer es intrínsecamente egoísta, al igual que nosotros. Nosotros cuando amamos, poseemos y pertenecemos. Cuando él la esta masturbando, lo que quiere es poseerla a través del placer que le otorga. Cuando se detiene y ella, con la boca entreabierta totalmente indefensa, le pide que siga, lo que hace es poner a prueba su poder con éxito.

Creo que mi mano esta enamorado de este teclado, y seguramente es correspondida, porque no paro de escribir mentiras en su nombre.

Hace tiempo regale a un amigo una caja llena de humo y cenizas, llevaba su nombre y era valiosa, eran los restos de nuestra amistad que poco a poco se fue olvidando.

Me gustaría destilar la esencia de un beso tuyo, uno especial...
Que me recordase el momento en el que aun seguías enamorada de mí.
Que me recordase como sabía tu lengua, tu boca, tu cuerpo apretado junto al mío.
Que me recordase donde estábamos y todo lo que habíamos compartido hasta ese momento.
Que me recordase porque cerrábamos los ojos y nos dejábamos llevar como dos adolescentes por nuestros sueños.
Que me recordase lo especial que es sentirse amado...

Pero ya sabes como soy, una vez lo consiguiera serías solo una pieza más de mi colección.

Mujer insatisfecha de palabra rápida y violenta, solo se quita su disfraz cuando el arrullo de su perversa risa sale a flote. Su alma en un baño de pereza no lloró al romperme el corazón, siempre frágil ante ella. Subyugaste al cenobita, retirado en su monasterio ante los terrores de la realidad, no queremos que sepa quien es ni sus límites, la libertad existe siempre que no se ponga a prueba.

La soledad de los amigos, la angustia del aburrimiento, la saturación del insatisfecho...cuando era un niño tuve un sueño, era un sueño preciado, brillante, cegador, único. Pensé que siempre estaría conmigo, que caminaríamos juntos toda la vida hasta cumplirlo...pero no fue así.

            Ahora, años después, a veces mi inconsciente recuerda y sueño con él. Le siento lejos, triste, deshonrado, ajado...pero brillante todavía, como un último y solitario haz de luz de un sol moribundo. Y quiero acercarme a él, decirle que aun estamos a tiempo, que me siento igual, que aun le necesito...pero en ese momento suena el despertador, la sensación de desamparo no me es desconocida, y me esfuerzo durante unos segundos en descubrir porque. Pero ya es tarde y hay que ir al trabajo. Maquinalmente sigo con mi rutina, ¿qué otra cosa podría hacer sino...?

La improvisada indolencia se viste en el escritor con la corteza de la escritura automática, ¿que valor tienen estos escritos nacidos sin rigor ni esfuerzo? Sería descorazonador que el azar marcase una genialidad y que el merito del artista solo sea el de mero conducto del inconsciente y no el ingrato trabajo. Un ejemplo: “como una visión de muerte triunfante sobre la humanidad mi sueño fue poco a poco muriendo...y desperté con mi mente indefensa ante el deseo que solo pide su consumación, la mano sube y baja produciendo un placer ya viejo pero no por ello menos egoísta en su rutina.

Los pensamientos dispersos abren cajones, armarios, recintos, y en las más ruinosas y polvorientas alacenas encuentran esa pequeña chispa de intrincado erotismo que la libido necesita para desangrar la pasión. Después del orgasmo viene una pequeña melancolía, como una despedida, como una sensación de desasimiento, de cansancio, de desgana hacía el segundo siguiente, hacía el minuto siguiente... con ingratitud alejas el recuerdo del amor con la misma celeridad con la que antes lo adorabas con lujuria y por fin, con un esfuerzo que se te antoja sobrehumano, consigues reanimarte y seguir con el día con naturalidad.”


Un Ramito De Violetas by Cecilia on Grooveshark

viernes, 6 de mayo de 2011

Escribo sin convicción, pero tú sabes que entre líneas mi alma se asoma y te sonríe con sinceridad.

Soy realmente bueno compartimentando mi propia basura. Me gustaba desnudarte y disfrutar de tu cuerpo como si fuera la primera vez, desentrañando el misterio, los matices, acariciándote los pechos, doblegándote, consiguiendo que accedieras a cualquier pulsión retorcida y enfermiza que me inspirase. Libar tus flujos hasta emborracharme, tu cuerpo era un milagro continuo.

Esos tatuajes de gatos con olor a menstruación, como una prostituta sin techo buscando amor en el desfile del corredor de la muerte. Sé que una relación no consiste en entrar en una mujer dos días a la semana. Solo quiero ir a una iglesia, santificar mi polla en agua bendita y follar ese generoso y opulento coño ante el altar, lubricar tu cuerpo con cera caliente de cirios sagrados y disfrutar con masoquista deleite de la elevada temperatura que provoco entre tus piernas. 


Paro de escribir, llaman a la puerta. Un amigo...o algo así.

Israel: Vámonos de putas, quiero hacerles un masaje en los pies mientras les pregunto por sus niños pequeños. Estoy harto de tanto coño dañado.
Rorschach: No puedo, aun recuerdo la última vez que me acosté con ella. Fue increíble pero jodidamente triste, quería entristecerme dentro de ella antes de que me convirtiera en su pasado frío, yermo, cauterizado. El orgasmo fue doloroso.
Israel:  La venganza es una polla fría entrando en el culo de alguien, insisto en lo de las meretrices...
Rorschach: No me aburras, sus palabras resuenan todavía en mi cabeza, esa trágica decepción en sus ojos.
Israel:  Para encontrar a Madoka, ese ideal de fémina, tienes que convertirte en alguien que merezca la pena antes, tenias un puto cuento de hadas y fuiste descuidado. Sentirte des-hecho/garrado/gajado es la lógica del momento, se pragmático en la coherencia de tu dolor.
Rorschach: Lo que más me excita de una mujer son sus gemidos de orgasmo, las putas no garantizan eso nunca, de todas formas me siento afortunado de haberla conocido, de haberla amado.
Israel: Joder, el puto amor. Tengo mi propio combo de corazón y polla. Un poco de oral por aquí, un poco de anal, ya sabes…irresistible.
Rorschach: De que puto planeta procedes, ¿llega la luz del sol…?
Israel: ¿Recuerdas que me pediste que te avisara cuando estuvieras tocando fondo? Beber todos los días entraña cierta decadencia sin brillo. Madura.
Rorschach: No soy capaz de masturbarme ya..
Israel: ¡Jesucristo!, menos detalles, ya sé que era un coño adorable, cálido, acogedor, prieto, impertinente. Con ese toque de vulgaridad que tanto te ponía. Pero hay más, muchas más, y algunas de prepago.
Rorschach:: Las mujeres solo quieren que las vean, que reconozcas ese elemento único que las diferencia, que las hace especiales, que te involucres en ese secreto que simbolizan y que te costara toda la vida desentrañar...
Israel: Divagas, estas borracho, me voy, te ahorro que me eches, situación capaz de acabar con una amistad tan longeva e inutil como la nuestra,

Soledad.


La llamo. Noto su sonrisa cuando me contesta. Ella siente algo especial, etéreo, pero alejado de la sima de amor apasionado y prospectivo que tanto anhela. Me recordará en noches en soledad viendo películas románticas en blanco y negro. Pero no soy Él. Es así de simple y costoso para el alma, no se puede forzar por la complacencia del momento. Pero, ¿como resistirse a quien tiene una capacidad innata para enamorar...tan perfecta, preciosa, inaudita? Y mientras su cadenciosa voz me revela un interior trufado de zonas grises y enmienda, hago un esfuerzo para no enamorarme.

La llamada termina.. Ya la echo de menos. Su voz juega con mi soledad como un baile de pájaros en celo. La botella expira su último aliento en mí, ya es viernes...todo sigue sin tener sentido, el potencial empañado por la desidia, por el deseo de morir y acabar con todo. Yann Tiersen suena de fondo, cierro los ojos a este continente de sueños sin cumplir y me arrojo de nuevo a la oscuridad.

Te llamaré cada cinco de mayo y siempre te preguntaré lo mismo: "¿eres feliz…?"

Azul y gris by Mürfila on Grooveshark

jueves, 5 de mayo de 2011

-Eres especial, tienes un talento inmenso, podrías hacer lo que quisieras y tendrías éxito. -Es lo que hago: quererte, en todo lo demás no me importa fracasar...

Los blogs son subproductos. Limpieza de telarañas del alma. Esconder la basura existencial debajo de la alfombra. Impudorosos suicidios exhibicionistas. La autentica libertad es huir de los convencionalismos sociales. Tu propia ley. Tu propio amanecer ficticio de locura alienante. Sucede cuando te lees todo lo se ha publicado de Bukowski y Panero y sigues estando sediento. Y la segunda botella de vino te incita a la melancolía. Y te acuerdas de ella. Ella. Todo o nada. Metáfora de universo paralelo de utópico romanticismo donde eres feliz tomando decisiones diferentes.

Llamada telefónica:

Rorschach: Mi prospectivo amor es una cuchilla moviéndose lenta y minuciosamente por antiguas marcas de muerte vertical.
Laura: Hola mi querido Rorschach, ¿has aprendido a follar?
Rorschach: Seguramente no. Pero ellas sí. Ellas siempre follan bien. Sobre todo con los demás.
Laura: ¿Te refieres a la paleta con sonrisa de mamada, la de los labios frambuesa?
Rorschach: Sí. No se puede sacar brillo a la mierda. Intenté crear arte, pero sólo conseguí mancharme de ridículo.
Laura: Me pones cachonda cuando hablas así, ¿quieres que vaya a follarte, me consideras un segundo plato?
Rorschach: Maldita puta, ¿no hay nada sagrado para ti? Eres la única. La musa. Un culo perfecto, cara de lujuria. Eres un recuerdo de sinrazón hecho costumbre. Se me pone dura sólo con escuchar tu voz.
Laura: Me encantan nuestras sesiones. La música extraña. El arnés que te colocas en la cara mientras me comes el coño.
Rorschach: La tengo dura. Todo es magnífico cuando hay alcohol y malas decisiones. Ven.

Casa de Rorschach.

Rorschach: El escritor no es un solipsista. Un texto necesita lectores para vivir. Mi polla también necesita de tu coño para respirar. Bienvenida.
Laura: Joder. Vives como un jodido animal.
Rorschach: Intento no perder la cabeza mientras me desmorono. Puedes elegir vino caliente y barato o cerveza con vodka.
Laura: Sino tuviera el coño húmedo y caliente diría que has fracasado en los preliminares.
Rorschach: Las mujeres necesitan sentirse especiales, deseadas. Tú ya lo eres, tienes un halo, una presencia. El problema son los demás. Eres un jodido cuento de hadas.
Laura: Joder, ¿Cómo consigues ponerme tan cachonda y tan triste a la vez?
Rorschach: Deja que te vende los ojos. Te amo. Te amo en tu insustancialidad. En la irrealidad de tu voz, en tu paranoia, en tu vivacidad/visceralidad. Amo esa parte de ti que sólo conozco yo, que siempre poseeré. El príncipe azul no existe, pero ya lo sabes. Sólo existen puntos de vista, anhelo y fantasía, que evocamos en el orgasmo.
Laura: Siempre me deprimes cuando te dejo hablar y no me follas directamente. Bájate los pantalones y pon a Liszt de fondo. Hazme el amor. Descubre el velo. Haz que olvide la cordura. Consigue que me enamore del instante. Quiero que se enquiste y pueda evocarlo siempre en un futuro pasado.

Venda. Palabras de amor. Lujuria. Se está despidiendo sin saberlo. Pero ahora se deja llevar, como siempre que escucha su voz y la tiene cerca. La ama pero no puede ser suya, y esa clase de tragedia es una adicción. La vida gira paralela a su erección. Sólo necesita hacerla feliz. La fluidez no requiere esfuerzos. Hay codazos, caos, pero cuando se miran comprenden sus sueños. Comprenden que están locos. Totalmente locos. Pero profetas de una lucidez romántica y eterna. Fue increíble, demoledor y exquisito a la vez. Orgasmos. Y abrazos que entienden de almas

Domingo Astromántico (Love of Lesbian & Zahara) by Love of Lesbian on Grooveshark

miércoles, 4 de mayo de 2011

Un coño nunca miente.

Laura: Eres el escroto más triste que he conocido en mi vida.
Rorschach: estoy cansado de ser el papel higiénico de perturbadas emocionales.
Laura: Un coño nunca miente.
Rorschach: Todo el mundo miente, aunque siempre me he preguntado como sería comértelo por primera vez.
Laura: Te enamoras con demasiada facilidad.
Rorschach: ¿No podríamos tener un polvo romántico?
Laura: Estoy enamorada de otro.
Rorschach: Werther nunca me resultó demasiado atrayente pero mi dependencia me descubre nuevas simas.
Laura: Eres un alma desfondada. Tu risa de mutilado me pone cachonda. Quizás tengas una oportunidad hoy. Pero mañana te despedazaré sin que puedas oponer resistencia.
Rorschach: Qué suene mi marcha fúnebre. Bailemos un tango. Bebamos el vino y juguemos con dados trucados.
Laura: No es una distopía romántica. Carne buscando carne. Mi coño empapado. Un poco de mierda interpersonal intentando ser transcendental.
Rorschach: ¿Entonces me quieres…?.
Laura: (Suspiras. Apartas un instante la mirada. Respondes con ese matiz en la voz que tan bien conozco.) Te quiero. Aunque te provoque daño. Aunque sólo sea el deseo de una niña consentida. Necesito verme reflejada en tus ojos. Tan perfecta. Tan especial. Tan deseada. Dejemos los juegos. Por favor: ven conmigo.

Te abrazo con fuerza. Beso el precipicio de tus labios de frambuesa. Temo decir esas dos palabras que arden en mi garganta. De pronto un pitido insoportable rompe la escena. Todo alrededor empieza a desdibujarse. Nos rodea un vacío blanco y nebuloso. Intento sujetarte pero empiezas a desaparecer. Nos despedimos con los ojos desbordados por la pena.

Despierto en mi cama. Me noto congestionado, con la cara húmeda. Miro a mi alrededor todavía desorientado. El sonido impertinente viene del móvil. Al mirar la pantalla... eres tú. Tú, siempre tú. Después de tres meses sin saber nada apareces de madrugada...


Lo apago e intento volver a dormir.


Con las ganas by Zahara on Grooveshark