lunes, 3 de octubre de 2011

Podrías ser el segundo advenimiento de Cristo y estar perdiendo el tiempo buscando a la puta adecuada.

Madrid no es sutil, es como una mole achaparrada, una fábrica hacinada y ruidosa, frustrante en sus distancias, una hora de viaje para encontrarte con un amigo, para ir al trabajo, para simplemente salir del centro. No sé hacer turismo en mi ciudad, la veo como una maldición, un atasco eterno, una ciudad gris y sucia, chabacana, como decía mi amigo cuando vino de Londres. De noche cambia, se transforma en una capital, la gente sale, se divierte, da igual si es un martes a las cinco de la mañana, hay en Gran Vía una pasarela internacional, una torre de Babel que te redime.

Pero sigue siendo un estado policial en el que siempre ves detalles absurdos, ¿qué ha pasado en Sol? Madrid no tiene entidad, no tiene bandera, somos la capital de España y el sentir general es indiferencia, indiferencia política. La única vez que he percibido una ruptura en esto ha sido con el deporte, el futbol. Pero incluso ahí la manipulación política no se puede llevar a cabo, no cobra sentido.


Barcelona me agrada más, es más diáfana, como pintada en escorzo, despeinada por el viento, abocetada por calles que siempre llegan al mar con trazos suaves. Puedes callejear por su barrio gótico, andar y aprendértela solo a pie, distrayéndote con esas coincidencias sociales que solo se suelen dar en los pueblos. Así noto las distancias en comparación con Madrid. El mar. Y la montaña. No hay indiferencia, al revés, hay monumentos, hay banderas, hay nacionalismo político, pero también deviene del espiritual que suele ser más agradable, como si fueran conscientes de una herencia cultural presente, no de fosas comunes.

Cuando me fui de Madrid no eché de menos la ciudad, solo a mi gente, y ahora cuando pienso en Barcelona recuerdo con cariño alguna zona, como la plaza Sant Felip Neri, alguna calle, la biblioteca de torras i bages. Y no es que me plantee ir allí a vivir –no me apetece hace un curso intensivo de catalán-, pero a veces me da cierta envidia ese enamoramiento que les brinda la ciudad, y que Madrid, alejado de compras o salidas nocturnas, es incapaz de provocar.

Pero que importa la ciudad cuando solo somos cacahuetes en un zoo. Una sabana levanta la mano y baila en la noche.

De cara a la pared by Lhasa de Sela on Grooveshark

16 comentarios:

  1. Pues a mi siempre me ha gustado Madrid, aunque me quedo con Barcelona y su mar. De Madrid me quedo con las noches locas en Malasaña, los amigos de Chueca y como no las porras!
    Sobre los nacionalismos, mejor lo dejamos...;P
    Saludos.

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  2. Muy buen relato Rors aunque algo provocador y, seguramente, crees disparidad de opiniones, como es habitual en ti.

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  3. Vaya, por ahí suelo salir yo, cuando salgo claro. Y sí, en Barcelona no sabéis lo que es un buen bocadillo de calamares ni hacer porras...xP
    ¿Nacionalismos entre gente inteligente? Bah, que tontería. Besos guapa catalana.

    Aina: bueno, es solo mi opinión subjetiva, no creo que moleste a nadie. Un placer tenerte por aquí.

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  4. Coñio, es verdad! me había olvidado del Bocata calamares! mmm con el hambre que tengo me está entrando una dentera que no veas...! ;)
    Besos guapo madrileño.

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  5. Ya comenté hace unos días algo sobre mi odio a las ciudades, por eso vivo en un pueblo semi-ciudad, pero compardo con madrid esto es un pueblucho. Me gusta el extrarradio del pueblo, todo son huertos, y hay bastante tranquilidad. Barcelona, Madrid... me quedo mejor donde estoy, eso me suena a mucha gente y mucho agobio. Prefiero esta soledad y tranquilidad, acompañada por música de otoño: http://youtu.be/u2picp1J-dA

    Abrazos :)

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  6. Para venirte a Barcelona no hace falta que aprendas catalán :-) es una ciudad "internacional", y hay más castellano parlantes de lo que la gente cree... es más, creo que en pocos meses, solo de escucharlo, acabarías aprendiendo a hablar catalán mejor que muchos catalanes!! xD

    Me ha encantado como has descrito mi ciudad... sin embargo, no estoy de acuerdo sobre lo que piensas de Madrid, yo tuve una sensación contraria, me pareció una ciudad amplia y fresca, grande en su historia, repleta de rincones curiosos y de gente sociable y divertida, solo le falta una cosa sin la que yo no puedo vivir... el mar.

    Besitos Sr. Rorschach

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  7. Chatnoir: los bocatas de la plaza mayor son ineludibles para cualquier turista que se precie. Un saludo.

    i*- La que canta con Lobos: Sí, exacto: mucha gente y mucho agobio. Gracias por la música, el piano imprescindible para estas noches. Yo vivo en el extrarradio, en una zona –por suerte- con bastantes parques y jardines y carril bici. Vivir en Madrid capital sería lo peor.
    Animo con el desamor…

    Onara: Para cuestiones de trabajo lo deseable sería saberlo, y tal como están las cosas…
    Madrid tiene sus cosas buenas, entre ellas la gente y sus turistas catalanas.
    Tenemos una playa artificial a orillas del Manzanares...somos así de chulos...xD
    Un beso señorita.

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  8. Tiene su aquel el dibujito, los pájaros son lo mejor

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  9. Búscate otra escusa para no vivir aquí.ni te imaginas la de gente que no sabe hablar catalán.Tú crees que muchos los inmigrantes que viven en barcelona saben catalan?
    sinceramente creo que aquí serías muy feliz. sólo te falta" tú española por el mundo"

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  10. Bueno, siempre habrá una isla desierta a la espera de su naúfrago.

    Saludos desde mi isla.

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  11. Te llevo siguiendo desde hace poco tiempo. Entre Barcelona y Madrid me quedo sin duda con Barcelona, pero supongo que será porque he vivido malos momentos en Madrid. O a lo mejor simplemente porque me gusta más.
    Pero eso no es lo importante, lo importante, aún sin que me guste el acto del halago, es que escribes de una manera brillante. Sin duda, de lo mejor que he leído caminando entre blogs.

    Un saludo.

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  12. Rorschach, ¿cómo puedes decir algo así? Madrid es una ciudad cálida, que te acoge y ya no te deja escapar. Sólo hace falta que te pierdas por el centro, o que te encuentres en la puerta del Prado, o que bajes hasta el Retiro, o te alejes hacia El Capricho. Yo adoro Madrid; llegué hace dieciocho años y no pienso marcharme nunca.
    Un beso.

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  13. Que sincero se lee este post.
    Me gusta.

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  14. El cielo de Madid no tiene compaación pero después de quince años en la capital del reino estoy volviendo a Barcelona.Y sin nivel C de catalán, solo usuario.

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  15. Vaya, hay chicas de Madrid, pero curiosamente son catalanas, es mi sino.

    Pseudosocióloga: ¿pero estas volviendo poco a poco o por partes? xP Bueno, pero no creo que en caso de ponerte a vivir allí, te resulte difícil recordarlo. ¿Qué te ha hecho empezar a volver?
    Un saludo.
    Imilce: Sí, de vez en cuando tengo momentos de debilidad...xP
    Lili: Sé que Madrid tiene cosas buenas, no deja de albergar muchos recuerdos de mi vida, pero para vivir prefiero Barcelona o cualquier ciudad pequeña.
    Un beso.

    Acróbata: busquemos el archipiélago entonces.
    Sbm: Gracias por tus palabras.

    Celia: Quizás me falta una interprete, pero ya sabes el poco éxito que tengo con las mujeres.
    Un beso palpitante.

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  16. Como buena enamorada de mi ciudad agradezco el esfuerzo del autor por transmitir siquiera una parte de su encanto.
    St Felip Neri es un sitio mágico y el mar es la clave de todo.

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