El
autobús llega. Te veo ahí, arrugado contra la pared, un libro en la mano, alto,
negro cuervo, observando con displicencia a la gente de tu alrededor. Tanto
tiempo esperando, y ahora tan cerca, a unos pocos pasos de nuestro primer
encuentro. Me siento invadida por el pánico, casi tropiezo al bajar. Sonríes de
forma cálida e insinuante y abres los brazos para recibirme. Maldito tramposo.
Me cuelgo de tu cuello y te abrazo. Me siento en celo teniéndote tan cerca, y
cuando tu mano derecha baja insinuante por mi espalda no puedo resistirlo y te
beso. Otra promesa incumplida. Te acaricio, me empotro contra tu cuerpo. Siento
tu deseo, no podemos postergarlo.
Cierras
la puerta del baño de la estación, me bajas los pantalones, las bragas, me
empujas con prisa contra la pared de azulejos fríos. No esperes, sáltate los
putos preliminares, ya nos besaremos después, ya fingiremos sentimientos con el
atrezzo adecuado. Ahora solo quiero que me la metas sin compasión, animalidad,
que me doblegues con tu polla, que busques un hogar dentro de mí y me arrases
sin piedad.
Una
locura. Salimos de allí vergonzosos, como dos niños pillados en falta. Cogemos
un taxi.
Al
llegar a tu casa todo continúa. Me desnudas con calma, te tomas tu tiempo para
aprender la geografía de mis lunares. Me agarras de las tetas sin romanticismo,
demasiado fuerte, muerdes mis pezones, aumentas el placer-castigo de mis puntos
débiles. Me tumbas en la cama y me abres, pasas tu lengua por mis labios, mi
clítoris, me penetras con esos dedos largos y enfermos mientras tiras del pubis
con los dientes; cuando estoy llegando al orgasmo introduces otro dedo para
sentir el espasmo, ese espasmo que me atraviesa y convierte mi espalda en un
arco perfecto, el único puente con olor a mar donde el suicida nace a la vida.
Lo prolongas con la lengua, excitado por mis gemidos desinhibidos.
Enciendes
velas mientras me calmo. Te la empiezo a lamer, a chupar, lleno mi garganta de
nausea que nunca se cumple, me follas la boca con más ritmo. Deslizo un dedo en
tu culo, tus huevos hinchados impactan en mi cara. No te corras, no, quiero más.
Me tiras al suelo, coges una vela y deslizas gotas de cera sobre mi ombligo.
Cada gota la acompañas con una embestida rápida y dura.
Mis
contracciones horadan tu polla. Me das la vuelta, asfixias mis pechos contra el
colchón, me separas las nalgas y me la metes por detrás con fuerza, sin
miramientos. Ahogo un pequeño grito y aprovechas para obligarme a chupar tus
dedos, como si fueran la polla de un invitado, no importa, soy tuya, sumisa y golfa.
Friccionas. Entras. Sales. Brusquedad. Dolor. Pero sobre todo Placer. Mucho
placer. Noto como te dejas llevar, tu peso sobre mí, ese espasmo tan brutal de
nuevo. ORGASMO. Te corres, me inundas, me pueblas. Para siempre ya no me parece mucho tiempo. Me mientes y susurras
jadeante palabras de amor. Victoria pírrica de mi ego ciclotímico.
Madrugada
de otoño, calor sofocante en el interior, dos suicidas follando al borde del
abismo, a punto de caer. Y a pesar de ello, aferrados el uno al otro.
Joder... Suena bien. Que para siempre ya no parezca mucho tiempo debe ser increible.
ResponderEliminarLa música... Como siempre, perfecta.
Follar al borde del abismo...
Besos muy ...
Es curioso, me gusta más la versión del disco de rarezas que la de Avalancha. Supongo que ese tipo de frases solo tienen sentido en la literatura, por eso escribimos y leemos.
EliminarHay que follar, el escenario a veces es contraproducente. Otra imagen excesivamente literaria supongo.
Besos largos.
Es que esa versión es infinitamente mejor. Lo que pasa que cuando he intentado xolgarla alguna vez, descubro que Spotify es muy limitado y no aparece.
EliminarHay que follar, si.
Somos demasiado literarios.
Besos como sean.
La versión es del disco rarezas y si está en Spotify, busca el disco directamente ;)
EliminarY gracias por la colaboración en el post, ya sabes.
Besos de madrugada.
"El único puente con olor a mar donde el suicida renace a la vida." eso y, la imagen formándose en mi cabeza del momento dedos de invitado, son las dos frases que mas me han sacudido de la entrada.
ResponderEliminarEs grato comprobar que aún hay almas sensibles como tú que saben destacar alguna frase afortunada, engendrada de casualidad, de este conjunto reiterativo de post sexuales…xD
EliminarTambién es una de mis favoritas.
Feliz semana. Beso.
Joderrrrr que marcha... Muy interesante.
ResponderEliminarFrustración sexual sublimada.
EliminarExperiencias pretéritas y cada vez más lejanas.
Pequeña nota a pie de página de un texto ajeno.
Al borde del abismo, mejor tener donde aferrarte.
ResponderEliminarIntenso.
Nah, implicado ya en la contestación de comentarios debo decir que el orgasmo es un precipicio acogedor cuando vas acompañado, solemos olvidarlo por la falta de práctica o de partenaire adecuado.
EliminarBeso.
Adoro cuando te pones así... pero eso ya lo sabes.
ResponderEliminar"El único puente con olor a mar donde el suicida nace a la vida" ¿Sabes lo bonito que es esto? Me dan ganas de robarlo, pero no podría citarte, supondría demasiadas explicaciones...
...y tantas otras cosas que no puedo decir.
Un beso o dos.
Vaya, insisto en que pensaba que sería excesiva esta compulsión por las entradas de índole sexual.
EliminarJa, ja. No tienes que citarlo, mis textos son tuyos, de cualquiera que me lea, no tienes que dar explicaciones solo compartirlo. Con lo efímero que resulta todo, no hay mayor honor.
Tengo que leer más atentamente tu nuevo post. Espero que te vaya bien en tu primer día de trabajo.
Siempre dos.
Compulsión tuya o mía? Jajajaja!
EliminarVaya! Así que ha suscitado un poco tu interés... Me halaga. Léelo y comenta, si gustas.
Lo que tus textos son míos, aunque los comparta con otra mucha gente, me ha resultado bonito.
Dos más.
Ya sabes, en el fondo sino hay público no hay comunicación y por tanto no hay arte.
EliminarO algo así decía gente con mucho tiempo para filosofar.
Subo otros dos ;)
Me da la risa (para mis adentros) cuando te leo así de impresionantemente impresionante, yo creo que me dejas tan catatónica, que sin quererlo se me dispara la imaginación ¿sabes? Verás, te veo en la parada del autobús expectante...lleno de ganas y cuando por fin se abren las puertas y comienza a bajar la gente, la buscas con la mirada y ves bajar... ESTO ;-) ...Quizá así te tomaría un poco de tiempo desmontar todas las piezas y evitarías el infarto:))
ResponderEliminarLo sé, lo sé... me terminarás odiando :))
Muuuchos besos, prometo ser más buena jajaja y ...
Graaacias, ya sabes, yo, me quedo sieeempre con 30 segundos... antes de saltar al abismo:))
Descansa mucho.
Nah, te agradezco el esfuerzo, sé que este tipo de entradas no son del todo de tu agrado, pero me dejo guiar por cierto material que aparece en mi correo. No debo desaprovecharlo así como así. Ahora haz tus cábalas como siempre…xD
EliminarSé que te gusta ese grupo, hace tiempo que no sacan nuevo disco por cierto.
Pues necesitaba descansar bastante porque tuve un viernes por la noche bastante intenso, a ver si me animo y escribo sobre ello. Incluso conocí a una mujer llamada Laura –como no- bastante interesante, de esas que luego provocan desvelos y mucha literatura. Naturalmente con novio. El cual me odia al parecer.
Divago. Besos, feliz semana.
Realista resumen.
ResponderEliminarTodo lo realista que permite la literatura claro ;)
Eliminar!!Hola, rorsch!!
ResponderEliminarQ bien narras la historia,me he sentido algo voyeur jajaja.Me ha fascinado.Lo de ego ciclotimico me ha encantado.Muy bueno tu relato.Muchísimos besitos,mon ami rorsch.
Besos a ti querida Celeste. Un placer que mires por esta mirilla de vez en cuando ;)
EliminarAnte un texto así, solo se me ocurriría decirle al autor siendo muy sincera:
ResponderEliminarVen
Y el autor, para evitar tentaciones y que no descubran su rubor, se esconde tras un párrafo especialmente largo.
EliminarPremio al mejor comentario de esta entrada ;)
Me encantan estas entradas tuyas^^
ResponderEliminar¿Sabes? Estoy leyendo "Mujeres" de Bukowski. Es lo primero que leo de él y en cada página me acuerdo de ti.
Uno de sus mejores libros por cierto. Quizás mi estilo es ligeramente diferente, pero no escondo que profeso absoluta idolatría a Bukowski. Un honor que nos relaciones. Cuando termines con ese, léete “Cartero” te reías mucho. Besos ;)
EliminarQué pero qué fuerrrrrrte impresión de madrugada!
ResponderEliminarAsí de buenas a primeras. Voy a releerlo una segunda vez, de un tirón.
El comité de Blogger desaconseja releer este blog, puedes quedar demasiado impresionada por el talento del autor y convertirte en una decadente…xD
EliminarBesos.
Lo guardo a cal y canto, en los rincones esenciales de mi alma, allí donde escondo las cosas más bonitas. Gracias.
ResponderEliminar