la Vida, ovillo que cae al suelo y se esparce en silencio sin que pueda
hacer nada para recuperarlo
un niño grita desde un balcón, como un herpes genital que agita su
humanidad en el aire.
Somos como pestañas suicidas cayendo avergonzadas ante el empujón sórdido
pequeñas dosis de litio floreciendo en el estiércol de un sexo
sobredimensionado
suicidas sin Suicidio en un espacio que nunca es inocente.
Las paredes resbalan intoxicadas
las pelusas se creen reinas pero sólo son marionetas que suspiran
fuegos fatuos, pavesas que mueren en esta copa con sabor a lluvia
y ahí afuera los arboles cantan, acunan el estertor del niño
humillan la lucidez dibujando notas sobre el Poema.
La autodestrucción me guiña un ojo
se sube la falda y desliza las bragas hasta dejarlas retozando en su
tobillo izquierdo
siempre es ella quien consigue romper el himen de mi indiferencia.
La Hiena me critica:
“Qué aburrido hablar de amor
–ese deber de Manicomio. De los laberintos se escapa por arriba”
Y le respondo con sarcasmo que no me decido, ¿se refiere a sus piernas
o a sus labios?
porque Ella es una mujer de
puntos suspensivos
capaz de abismarte con uno solo de sus paisajes
los tacones manchados de semen pero con unicornios entre los muslos.
Y la Hiena me replica:
“No conoces el secreto de la
Nada, el Amor es un fuego que desfigura, ven conmigo, violemos a la Belleza”
Pero me resisto, porque sé que detrás de esa mascara, de esos ojos, sólo
existe el Miedo
y aunque mi corazón es de madera me arrodillo ante el Poema
y el Orgasmo –hijo bastardo de la Muerte- besa mi cicatriz de gasolina
con los labios fosforo de la Musa.
La explosión acaba en el acto
con el laberinto de tijeras hambrientas.
Y al abrir los ojos vuelve a eclipsarme su mirada azul
pero esta vez si me atrevo a decirle:
“Disculpa, no quiero
interrumpirte, pero estás apoyada en mi abrazo…”
Es muy bonita esta entrada también . Enhorabuena.
ResponderEliminarGracias bella dama ;)
EliminarSin duda que si se acabaran las mujeres no se acabaría la poesía pero sí los poetas como tú.
ResponderEliminarAbrazos y, por qué no, un beso en la boca.
Me gusta salpicarme con los accidentes femeninos. Podría corresponder a ese beso con lengua, pero prefiero lamer el escupitajo que el Escorpión deja a veces en tus poemas.
EliminarUn abrazo.
Apoyarse en el abrazo... a nadie le apetece salir de ese rinconcillo :)
ResponderEliminarMe encanta todo lo que resulta de trenzar tus tuits.
Bss
Me cuesta dejar morir al blog, y eso que cada vez tengo menos ganas y menos tiempo. Pero solo me falta una entrada para las quinientas ;)
EliminarEs divertido plagiarme a mí mismo, porque salen cosas nuevas, a veces diferentes, mejores, extrañas. Los beats también hacían algo parecido, coger frases al azar en sus escritos, combinarlas. Hay que jugar, eso es lo más importante.
Besos!
Me gusta el final "estás apoyada en mi abrazo"...
ResponderEliminarEres tan tonto... que te mereces un beso.
Las mejores frases siempre para el título de la entrada y para el final, trucos de decadente ;)
EliminarGuardo tu beso en la jarra de la miel y te mando un par de ósculos con sabor a precipicio.
Abrazo!
Rorschach, eres el poeta de las poesías imposibles.
ResponderEliminarExquisita, escritor.
Besos de los que quedan todavía.
¿Me dejas beber la respuesta de tus labios de tirabuzón? ;)
EliminarGracias querida Jane. Besos.
Me dejas muda.
ResponderEliminarlos ojos se me inyectan
Esa es la idea, no dejar indiferente ;)
EliminarCualquier anotación a pie de página que desees hacerme, ya sabes, al correo.
Abrazo.
leerte es excitante
ResponderEliminarsiempre más
Gracias por la lectura, un placer tenerte por aquí ;)
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