sábado, 2 de marzo de 2013

Watchmen (II) Reflexión sobre el personaje de Rorschach.

Rorschach (Walter Joseph Kovacs) es uno de los personajes de la aclamada serie limitada de comics de DC publicada entre 1986-1987, posteriormente llamada novela gráfica, Watchmen, creado por Alan Moore junto al dibujante Dave Gibbons, con elementos reminiscentes de dos creaciones anteriores de Steve Ditko: The Question y Mr. A.

Si el Daniel Dreiberg (Nite Owl) es un personaje que recuerda, con su disfraz y sus gadgets, al Batman de Adam West, Rorschach, es más bien el retrato psicológico del término que haría popular al Bruce Wayne de Frank Miller: un psicópata.
Los pensamientos de Rorschach y sus acciones nos muestran un ser que cree fuertemente en el absolutismo y la moral objetiva, donde el blanco y el negro están claramente definidos y no existe el gris, donde el bien y el mal se diferencian con claridad y el mal debe ser castigado violentamente. Se aliena de la sociedad con el objetivo de realizar estos fines; todo estos términos maniqueos quedan simbolizado en su propio nombre: el test de manchas de tinta, y en su mascara, que él considera ya, en el presente de la acción, su cara, su verdadero rostro.

La identidad secreta de Rorschach no representa nada, aunque es cómico verle pasear en los primeros números con un cartel  "El fin está cerca”. Su nombre es Walter Kovacs, su madre, leitmotiv de su misoginia, era una prostituta abusiva y cruel. De su padre, a quién jamás conoció, tiene la romántica fantasía de que trabajaba directamente para Truman y que murió en combate luchando contra los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Después de un incidente muy violento en que se vio envuelto con apenas diez años, los servicios sociales descubren las condiciones sórdidas en las que vive y le apartan de su madre.

Pasan unos años y a raíz del asesinato –suceso real- de Kitty Genovese decide ponerse una mascara y junto a Nite Owl combatir el crimen bajo los códigos éticos que definen un héroe: arrestarlos y dejar que los tribunales hagan su trabajo.

Pero la catarsis psicológica que deviene después no es como la de Nite Owl al superar su impotencia sexual, o la del Dr. Manhattan al recobrar el interés por la existencia humana a pesar de su omnipotencia, en Rorschach las condiciones de su patética y violenta infancia ni siquiera son suficientes para prepararlo al vistazo del abismo de Nietzsche: la maldad no son maquiavélicos planes de supervillanos, la maldad simple y llana es una persona que rapta, viola, despedaza y da de comer los huesos de una niña de tan solo seis años a sus perros, sin escrúpulos ni sentimientos de culpa, esas situaciones que nos esforzamos de forma pragmática en llamar perversiones u anomalías de gente enferma para poder seguir viviendo en nuestra burbuja de normalidad, son las que él se ve incapaz de ignorar, el nihilismo le supera, no hay expiación, ni siquiera por un Dios que no existe, ser testigo es lo mismo que perpetrador, y es esa lógica básica la que arrastra a Kovacs a convertirse en Rorschach, cruzar la línea y matar a ese violador.

Moore y Gibbons llevaron hasta el final las consecuencias de una postura ética extrema; cogen los pocos elementos salvables de Taxi Driver –película sobrevalorado, entre otras cosas porque nadie entendió su crítica a la sociedad americana ni su final-, y con talento, mucho talento, emergió un personaje eterno. Frases como “Jamás me rendiré, ni ante el apocalipsis”, o ese momento brutal, cuando está en la cárcel acosado por todos los delincuentes que ha encerrado y dice: "Ninguno de vosotros lo entiende. Yo no estoy encerrado aquí con vosotros. Sois vosotros los que estáis encerrados aquí conmigo“ son un claro ejemplo.

Quizás por eso da la sensación de que, a pesar de todo, Rorschach es el verdadero héroe moral de la historia, y por eso emociona tanto el clímax final, lleno de simbolismo, cuando se quita la mascara y se enfrenta al Dr. Manhattan.

¿Qué importa un cadáver más entre los cimientos?

Hace dos años, cuando decidí abrir el blog, el primer problema que tuve fue encontrar un alias, un nombre que representase desde el anonimato algo importante para mí; pero lo resolví fácilmente, a fin de cuentas, escribir, es también ponerse una mascara.

Sound Of Silence by Simon & Garfunkel on Grooveshark

15 comentarios:

  1. Hace casi dos años consulté el origen de tu alias. Todas tus lectoras lo hemos hecho en algún momento, por curiosidad malsana ;) El título de este post, es a mi modo de ver: Las máscaras de Rorschach. Por cierto, En el post anterior me ha parecido que esa boca es la misma que utilizas en tu enlace, ¿sí?
    Beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola. Oh, vaya, es posible, pero me gustó la idea de aclararlo con mis propias palabras, no había tanta información antes de la película, y después de algún comentario creí conveniente rendir este ligero homenaje. Sí, quizás ese título sea más adecuado.
      Ja, ja, no, es de una imagen de un post de hace casi un año, justo cuando habilitaron esa opción, ¿es bonita la foto eh? ;)
      Besos a las tres, feliz domingo.

      Eliminar
  2. El personaje de Rorshchach me gusta, no conocía el comic hasta que vi la peli (soy una freaky pero gandula...) y fue el que más me gustó de todos ellos.
    Creo que, después de Batman, es mi héroe favorito.

    Siempre he creído que te queda bien usar su nombre como alias, me gusta haber visto el porqué lo elegiste...

    Un besito de tinta...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Todo nació de tu mensaje, hacía tiempo que no veía la película, y al día siguiente cuando volví a disfrutar de la versión integral me pareció bastante inadecuado no tener alguna entrada dedicada al tema. Pero bueno, ya sabes que la indolencia está la primera en la lista de mis taras.
      Besos de tinta milady.

      Eliminar
  3. Jeje, menudo personaje...me encanta la frase en la cárcel.
    Interesante, porque me he preguntado muchas veces con curiosidad de dónde saldría ese nombre, no tenía ni idea, yo de comics es que nada de nada.
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La frase de la cárcel es brutal, y como escapa de allí también, si no has visto la película te la recomiendo encarecidamente.
      A pesar de la decadencia mi persona es un contubernio de pulsiones freaks…xD
      Como curiosidad la foto de la entrada es el poster que tengo en mi habitación.
      Besos, querida.

      Eliminar
  4. Me parece lógico llegar a ese punto. Cuando ves mucha mierda de qué sirve encerrarlos? En realidad no sé cómo otros pueden aguantar el tipo y no matar a nadie. Dexter se basa en él? Me ha recordado la historia.
    Ahora me gusta más tu nombre. Me ha caido bien.
    Besos sin tonos grises.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No, Dexter realmente no tiene nada que ver, es un asesino en serie, está basado en los libros de Jeff Lindsay ;)
      Rorschach comete ese asesinato, cruza la línea, pero no tiene esa necesidad de matar, aunque siga empleando una excesiva violencia, el cambio del personaje se produce más bien a nivel psicológico, ya no cree en la rehabilitación, ya no es un juego, está rodeado de monstruos.
      Besos de domingo soleado.

      Eliminar
  5. Muy interesante...

    :)

    Está claro que sabes romper el sonido del silencio, y de qué forma, con o sin máscara...

    Esa canción al final del post me parece el colmo del buen gusto...

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mi también me gusta mucho, además salía en la banda sonora de la película, por lo cual tiene algo de relación con la entrada ;)
      Todos en cierta medida rompemos el silencio con el sonido del teclado, y rasgamos, desfloramos la página en blanco; con el tiempo se ha convertido para mí en un sonido agradable, sobre todo de madrugada.
      Un abrazo muchacho.

      Eliminar
  6. Entré por estos pagos de mera casualidad y me gustó tu apreciación del personaje. Saludos desde Salta Argentina. Damian Wayne. Jajaja vaya club de fanas que tienes ahí eh! Todo un rockstar! xD

    ResponderEliminar
  7. Yo buscaba info de si se atrevían a sacar una segunda parte de watchmen, ya que en el cómic es limitada... pero con tal historia, quien no se anima a sacar una segunda parte? Rorschach es mi favorito, luego nite owl, gran novela gráfica, sabía de au existencia pero no me llamaba la atención, luego vi la pela, me deacargue la novela, y... BOM tremenda historia, yo soy u aficionado a leer cómics y ver muchas películas, sin duda es de las mejores historias tanto en la peli como en la novela, ya que es bien adaptada al la novela. Nite owl se le ve mucho en otras historias de DC me gustaría que saquen mas y mas de estos grandes personajes ^^ buena biografía. Vibras

    ResponderEliminar
  8. Me gustaría saber porque Taxi Driver te parece una película sobrevalorada. Gran Post por cierto.

    ResponderEliminar
  9. Entender mal a Rorschach:

    https://magnet.xataka.com/idolos-de-hoy-y-siempre/que-alan-moore-dijo-mal-que-muchos-sus-fans-habian-entendido-a-rorschach

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por el artículo, aunque casualmente ya lo había leído. Estoy bastante interesando -obvio- en la serie de Watchmen y suelo leer todo lo que sale sobre ella por si algún día me animo a realizar alguna reseña, y también para ver si he pillado todos los "easter egg" de cada capítulo https://hipertextual.com/2019/10/todos-easter-eggs-que-podras-encontrar-episodio-numero-dos-watchmen-hbo
      .Este artículo me pareció bastante interesante, con información bastante completa. Pero lo primordial es que a Alan Moore primero le encargaron hacer una serie con los personajes de Charlton Comics (The Question entre otros) y luego se echaron atrás, y todo el material que tenía lo empleó en Watchmen, es decir, que la retórica o roles de cada personaje venían ya dados, al igual que The Question tiene connotaciones de Batman. Alan Moore es un genio, eso es indudable, y Watchmen una obra de arte, pero a veces las circunstancias ajenas ayudan.

      Un saludo.

      Eliminar