viernes, 30 de septiembre de 2011

Articulo provisional de la Wikipedia sobre los decadentes...

DECADENTE:

Características y Etólogia: dícese del ser psiquiátricamente perturbado que vive hacinado en una habitación sin vida social. Fracasa como intelectual porque no entiende lo que lee, y ante los postulados ideológicos de Aristóteles o Nietzsche solo es capaz de crear su propia y masoquista versión antitética de la felicidad – a la que considera algo analfabeta y sorda porque nunca se convierte en arte- en la que el dolor y el miedo son los reyes de la fiesta. La medicación es demasiado cara y muere aplastado en sus propios sofismas y recuerdos inventados de factura/fractura espiritual de belleza incuestionable pero que son simples pedos alucinógenos que aturden al lector. Se recomienda huir ante semejantes sujetos, son peligrosos, tremendamente alienantes y contagiosos. Joder, esta es una advertencia sería: Escapad féminas, no os hagáis ilusiones: solo os comerán el cerebro, nada más.

Reproducción: No sé reproducen –gracias a Dios- solo se masturban compulsivamente visitando páginas de porno duro, lo que les hace desarrollar filias muy diversas imposibilitándoles a tener una vida sexual normal. Normalmente se dedican a enviar cartas a mujeres apresadas en el corredor de la muerte o a locas ya establecidas en un manicomio. Creen que Kafka tenía una vida sexual normal y le rezan por las noches.

Alimentación: Suelen comer mierda recalentada en el microondas. Suelen tener doce platos al año, es decir, comen lo mismo durante un mes, y luego cambian al siguiente de la lista. Todo enlatado y los últimos meses caducado.

Riesgos sanitarios: No suelen salir de su habitación, pero a veces, en situaciones extremas como una sobreexposición de la película “Fight Club”, se reúnen en pequeños contubernios que coinciden con accidentes o muertes surrealistas. Sabemos que están detrás del incendio del Windsor y de todos los casos de escándalo público que se registran en Madrid las noches de luna llena.

Películas: Si son mujeres –hay pocos registros- suele calar el combinado Dirty Dancing/Helado, Amelie y Desayuno con Diamantes, revisiones de Jane Austen y un poema de Kat Stratford. Si son hombres las mismas, pero sin helado. Quizá “Leaving las Vegas” y “la novia de Re-animator” por el rollo romántico decadente.

Música: Pocas canciones y siempre en repeat durante horas. Creemos que sucede porque su cerebro se ha quedado anclado en alguna etapa inicial de desarrollo y no son capaces de lidiar con demasiada información. Siempre escuchan a gente muerta o hacen planes para matar a algún artista que consideran que esta defenestrando su legado desde el segundo disco.

Habitat natural: Normalmente habitación insalubre equipada para una futura invasión de zombies y el Apocalipsis maya del 2012. Cucarachas. Botellas vacías, y tres cubos para necesidades de diversa índole. Y dos ambientadores de pino.

Teléfono: Tienen la agenda vacía y nadie les llama pero sin embargo insisten en tener el modelo más caro del mercado. Usan el réquiem de Mozart como politono y los más avispados utilizan la base de datos de su trabajo de teleoperador para acosar a desconocidas con mensajes de voz de variables locura a altas horas de la noche. Releen los mensajes de publicidad que les llegan porque nadie responde a los suyos.

Historia evolutiva: Se cree que mutaron de algún ratón de campo afectado por la nube radiactiva que llegó a Europa de Chernóbil. Su pene es enorme pero no saben usarlo debido al estado digievolucionado de su cerebro. Se pensó en sacrificarlos, pero tienen un claro instinto de autodestrucción por lo que se prevé que en una década habrán desaparecido.

Características notables: Follan (muy) bien una vez que consigues amaestrarlos. No entienden el principito, pero muestran la lealtad de un animal de compañía y si se portan mal les puedes zurrar con una zapatilla, lo cual después de un día de trabajo agotador –les tienes que mantener- viene bien.

Reglas básicas de adopción Gremlin/Decadente: No les dejes beber o echarse vino por encima: querrán conquistar el mundo. No les dejes salir a la calle a la luz del sol: no están acostumbrados y les puede dar un ataque de ansiedad. No les dejes despiertos después de media noche: querrán escribir chorradas y luego publicarlas en un blog.

Enlaces externos: Para más detalles visitad a diario esta página o preguntad directamente a uno de ellos. No nos hacemos responsables de lo que dicha información cause en vuestro animo vaginal.

Amor castúo by Extremoduro on Grooveshark

jueves, 29 de septiembre de 2011

Hay gente que es feliz con un televisor y un centro comercial cerca de casa. Y son mayoría.

Alguien me dijo que había que llenar los huecos de los días anónimos, días que te sientes deshabitado, con los pulmones llenos de agua, podado de forma inmisericorde. Entonces te sientas e intentas la trazada absurda, kamikaze, un reguero de pólvora que termina atravesándote con un suspiro, dedos invisibles atando cicatrices en un re melancólico y repetitivo.

Chopin muriendo en Mallorca. Son reflejos en charcos insanos, lectores en diagonal que buscan sexo y violencia en la primera línea, la sorpresa YA, sin dilaciones, elipsis cuadruplicándose en un eterno retorno de la recreación. Pero estoy harto de fingir vivir cuando lo único que hago es dejarme vivir, disimulando estertores en habitaciones muertas.


Te pienso. Eres un lenguaje de signos lleno de nudos y bolsillos vacíos apuntando a una nada que realmente no compartimos. Manos que no son manos si no acarician tu voz y la sostienen en el humo, te balanceas en mi retina como un atentado de láudano, un rapto de lucidez. Pero no, estoy desesperado, no hay poesía en ello, solo quiero conquistarte una noche y luego, ya colmado, defenestrada ya por fin la fantasía, abandonarte cansado y aburrido desde la cama. Sin más romanticismo que el amor de mis cojones y una vanidad herida desde pequeño.


Transmission by Joy Division on Grooveshark

lunes, 26 de septiembre de 2011

Rorschach empieza una semana de mierda.

El talento en la escritura es como penetrar tu mente y verbalizar tu alma, una epifanía intelectual en la que te sientes reconocida. La soledad de tu vagina se rompe físicamente, aquí se trata de raptarte de la entropía de tu entorno durante unos instantes convirtiendo tu cárcel en mi hogar.


Puedes engañar al lector potencial usando palabras de diccionario trasnochado, hablarle de sexo, miserias, filias, fobias...no dejan de ser mecanismos sencillos, causalidad de lugares comunes mil veces transitados que solo provocan un orgasmo Pavloviano. El talento es extemporáneo, un niño mimado que juega con tus endorfinas, que te hace lubricar y luego te abandona sin valorar nada, por eso cuando lees que te amo te resistes a corresponderme.

**
Se acerca otra noche, otra ventana iluminada sin misterio. No queda mucho cerebro que desollar. La autocompasión invita a la siguiente ronda y el miedo a la falta de transcendencia me enajena: quiero olvidarme del propio lenguaje, traicionarlo como él ha hecho conmigo. Camino en círculos arrastrando los pies como una metáfora contenida de mi alma. Podría dejarme morir aquí como un anciano sin jubilación, como un mueble molesto, apolillado, feo, anacrónico, sin utilidad. Comida para perros. Excrementos esperando a que alguien tire de la cadena. Hace tres semanas desde el desencadenante, la catarsis que erradicó mi subjetividad el tiempo suficiente para reconocer ante el espejo lo que todo el mundo sabía: soy un escritor mediocre. Que putada.

Rodeado de basura espero el milagro junto a Leonard Cohen cuando llama mi querido amigo Daniel. Oriundo de barrio pijo, de carácter emprendedor, ambicioso y competitivo, formamos un curioso contubernio: mi presencia disipa por comparación –sin aspiración a ser un beta, me quedo en el paría omega- cualquier duda sobre su ascendiente y me permite disfrutar con las vaginas resentidas que chocan contra su demoledora presencia.

Un ejecutivo de éxito, una casa a las afueras, un buen coche, el pelo en su sitio al igual que todo el resto del mueble bar que moldea en el gimnasio. Su mujer embarazada completa el cuadro. Sin mundo interior pero decoradora de interiores, la susodicha es un robot perfectamente engrasado moviéndose en el escaso espacio que le dejan los convencionalismos y la alienación política. Se ha comprado la biografía de Rajoy, el tercer libro de su biblioteca, con esto dejamos las metáforas a un lado, queda todo dicho.

Naturalmente todas las personas tienen su cara B y nuestro coprotagonista no es una excepción. La cara B se refiere a esa realidad que hace estallar por los aires todos los juicios de valor prosaicos basados en los breves encuentros sociales. Ex de amigos que parecen pequeños duendes de jardín sumisos y se revelan como autenticas arpías desleales, muchachas pizpiretas que acaban ingresadas en el hospital con las muñecas vendadas…o machos alfas envidiables que en realidad son politoxicómanos peligrosos. Me ha llamado para que fuera a por su dosis, tiene reunión y promete una compensación a la altura de las circunstancias.

Y he aquí el motivo por el que me encuentro en este coche, yendo de kunda a la Cañada Real, acompañado por un par de putas y un yonqui crepuscular, a por sus dos micras de base y de caballo. Que cabrón. Durante el viaje una de las putas me ofrece su boca desdentada, ese pozo contagioso, por cinco euros, la otra aparenta cincuenta años pero no debe de tener más de treinta, el yonqui temblando a mi lado con los ojos desorbitados y sin poder apoyar el culo en el asiento -¿estreñimiento o una versión masculina de Sera en Leaving Las Vegas?-, y ya por último el conductor algo paranoico confundiéndose de camino constantemente.

Conseguimos llegar de alguna manera. Más miseria, más jóvenes con cara de viejo mientras una ambulancia del Samur recoge desechos del suelo. Pido mi parte en una casa al azar, el tipo, un rumano con la cara llena de ronchones rojos, me da el material, hay un par de niños de unos cinco años descalzos llenos de mierda dando trozos de papel albal.

Volvemos todos al coche, el tipo que conduce pone la radio, suenan Los Secretos. Joder, genial, una de Lou Reed, o de Antonio Vega y ya nos podemos lanzar por un terraplén. Intento distraerle –se llama Pablo, licenciado en económicas, en paro, sin ningún ingreso desde hace seis meses- pero esta demasiado atacado de los nervios observando como las putas ya están quemando la mezcla y fumándola. El yonqui no es problema, se ha debido de picar antes y esta totalmente ido. Pablo se caga en todo cuando se cruza con unos policías, pero están riéndose con unas yonquis de la zona. Salimos de allí echando ostias.

No sé que hora es cuando llego a casa pero Daniel no ha llegado todavía. Me relajo tumbado en mi jergón mientras escancio unas cervezas calientes y me recreo en los consejos deformados de la Velvet. No tengo que esperar mucho, un par de horas después le tengo frente a mí. No podemos ser mas distintos: con mi camisa de Iron Maiden agujereada, pantalones rotos, rapado, sin afeitar…él con su inmaculada imagen de ejecutivo, su peinado, su sonrisa perfecta…lástima esos ojos enfebrecidos...esas manos de manicura modelando el aire con ansiedad.

Nos damos un abrazo y se va al baño con la mercancía. Vuelve al rato y se tumba conmigo. La pesadez no le dura más de quince minutos, debe de estar acostumbrándose a esta mierda, o quizá la han cortado con laxante o anfetamina barata.

Recaliento algo para cenar. Él no quiere nada. Me confiesa que lleva una vida de mierda.
“Estoy siempre con la BlackBerry recibiendo mails, mensajes, es como trabajar veinticuatro horas, un puto stress, no puedo desconectar, solo con esto…y últimamente ni así. “
Le cuento que mi novia me ha dejado hace tres semanas, no le gustaba mi forma de vida, no estoy a la altura. No hubo grandes dramas, casi fue un traveling de película: cita en un café, monologo, alguna lágrima de colirio, beso en la mejilla. Tuvo el detalle de pagarme la cerveza.
“Mierda, son todas unas zorras, seguramente te ha hecho un favor.”
“No, es una mujer magnifica. Ahora estará adorando el tótem de otro, arrodillada, lamiéndolo durante horas. Es muy complaciente. No se le puede echar en cara que además quiera ser exigente. La erótica del poder no funciona con un fracasado, ella merece algo más.”
“Tu necesitas echar un polvo y rápido…conozco un sitio magnifico.”
“No sé, prefiero el alcohol.”
“Tú déjame a mí, ya veras como merece la pena. Tengo un par de horas hasta que mi agujero preñado reclame mi presencia.”

Me lleva a un prostíbulo de chinas, la cosa más sórdida que hay. A la tierra le salen de pronto dos pequeños satélites que se bambolean con la rotación: son los cojones de mi amigo que se atreve a discutir con la madame el precio de nuestro servicio. Al final llega a un acuerdo y con una palmadita en la espalda me dice que tengo dos horas con la que quiera. Él se retira con dos, espero que les pague un buen suplemento, sus filias han ido a peor.

Elijo con desgana a la más joven, unos veinte años. Su maquillaje es como un ejército de soldaditos de plástico verde. Entramos en la habitación, me lava un poco, se desnuda y se abre de piernas. Me pongo romántico y me da por esnifarme lo que me queda de coca sobre su coño reseco. Esto no funciona, parece una sordomuda retrasada. Pero claro, ¿Qué me esperaba?

Tengo ganas de huir, ¿Qué hago aquí de todas formas, busco algo que me denigre, una venganza? La puta sigue ahí, totalmente ida, como una puritana entregando su virginidad mientras mira una cruz colgada en la pared. Estas son las únicas bajezas que la clase media extinta, sin talento para nada, puede permitirse…puro hedonismo cartesiano.

Le doy dos bofetones para que reaccione, se asusta un poco, le meto varios dedos en ese coño como ceniza de cigarrillo y le agarro del pelo para que me la chupe. No sabe chuparla muy bien, pero al menos produce algún sonido gutural que me excita. Su coño ya empieza a lubricar, algo ajeno al placer de mis perforaciones. La tumbo y le obligo a lamerme los cojones mientras pellizco sus pezones con saña. Un par de bofetadas más y empieza a chuparla con un poco más de alma.

Bien. Años de experiencia. Seguimos así un buen rato hasta que por fin empiezo a follármela con cierta intensidad, no creo que llegue al punto de ruptura, pero aquí, mientras la sodomizo brutalmente y empiezo a escuchar sus gemidos acompasados, mientras mi polla la perfora sin más sentimiento que untar una tostada con mermelada, me doy cuenta de cual es mi papel en el mundo. 


Y sonrío.


I Sit On Acid [Soulwax Remix] by Lords Of Acid on Grooveshark

martes, 20 de septiembre de 2011

Túmbate en la cama, te ayudaré a recuperar el tiempo perdido y a conquistar el mundo en un abrir y cerrar de piernas…

"Entiendo que estés cabreada, has dedicado tu adolescencia a cultivarte, has estudiado una carrera, has preparado unas oposiciones, eres políglota y solo ves películas en versión original, tienes un nivel de ingresos altos… y ahora, enfrentándote a la madurez, te das cuenta de que lo que más valoran en ti es tu COÑO, tu precioso y poco usado COÑO. Pero tranquila, túmbate en la cama, te ayudaré a recuperar el tiempo perdido y a conquistar el mundo en un abrir y cerrar de piernas…”

Soy un muñeco de arena llamado Mario. Hoy no toca comer, las facturas insisten en seguir llegando, pero tengo el dinero exacto para comprar una botella cada día hasta final de mes y eso me tranquiliza. Me alimento de viento, pasta recalentada y visitas al comedor de indigentes de la zona centro. Ya me siento como un mendigo lleno de cupones sin premiar, con esos horizontes interiores llenos de alambradas y manicomios abandonados. Y nada más.

El ordenador farfulla bilis moribunda, blanca, como esta pagina que mancho con el sonido del sacacorchos, con el color sinestésico -o cenestésico ya no sé- de tacones de mujeres embutidas en cuero negro y pupilas dilatadas por la droga, de hadas de absenta y putas sin clase. Pero, ¿qué importa? No encuentro la pulsión, no es culpa del hambre, la miseria, la no-música de alrededor. NO, el problema es mi cerebro, desalojado ya de cualquier brillo, quizá sea culpa del saturnismo que me provoca las cañerías ilegales de plomo, pero nunca podría renunciar a ese sabor lisérgico del agua que hace que la palabra cadencioso tenga algo de sentido.

Hay demasiada mierda bloqueándolo todo, demasiada gente intentándolo desde hace décadas con ahínco, vocación, ensueño y sin nada de éxito. El deseo es el paisaje que ve desde la cama un tetrapéjico, algo estéril sin interacción. Sólo conozco la patente de corso del coño. En mi buzón solo hay resignación, la vida es una carrera de fondo sin premio, sin ganadores, quizá ayude subrepticiamente mantenerte ocupado saltando a la comba con tu sombra, intentando no perder lo imperdonable, creyendo tener elección como tantos millones de seres antes que tú.

Tengo una excusa genética: hay dos alcohólicos en mi familia. Un sumidero; pero no hablamos de potencial, ni siquiera sé quien invento Internet, no tiene sentido intentar destacar, vivir bien sí, la alternativa al hedonismo como clave de éxito sería masturbarse con el carnet de biblioteca y no tener miedo a la soledad, ¿qué importa no haber comprado ropa nueva la última década?

Los alcohólicos no son agradables. Jim Morrison era un impresentable, vomitando, meándose encima, engordando, perdiendo el poco talento que disimulaba, ah, era guapo, poco más, se pudo follar a Janis Joplin y no lo hizo, insisto: era un pobre hombre. Un niño asustado. Sí, aquella última entrevista, sus poemas… he leído cosas mejores, he dicho cosas mejores cuando fumaba lo mismo. Pero era guapo y está muerto. No puedo decir lo mismo de mí, aunque también esté un poco muerto. Pero no veo camisas de Carver, o de Dostoievsky o de Camus. A lo mejor eso no vende entre adolescentes pajilleros que buscan una personalidad propia fuera de si mismos.

El aplazamiento es una secuela más. Las cosas importantes, las cosas GRANDES tardan en aparecer, requieren mucho esfuerzo, requieren templanza; estuve el otro día en un estudio de grabación con el productor de Vetusta Morla, unos amigos llevan meses allí dentro para sacar adelante su disco, con una inversión de sesenta mil euros en producción y comercialización. Las grandes hazañas requieren sacrificios. Como el amor. 

Ya sé, estáis cansados del tema, me incluyo, pero no deja de ser cierto, el amor es un trabajo, veinticuatro horas, cada día de la semana, todo el año. Con compañeros ingratos y despóticos que te engañan con las condiciones del contrato/noviazgo para más tarde despedirte sin ninguna consideración. Cuando consigues cambiar a otro tipo de contrato/matrimonio, y ya tienes unas condiciones fijas, una seguridad, vacaciones, paga de navidad, etcétera, descubres que la pasión nacía de la inestabilidad. Pero todo tiene solución: ahora tienes a gente trabajando para ti, tu empresa/hijos. Todo sería perfecto si te siguieran follando con la misma intensidad, pero la verdad, con una empresa propia, ¿quién piensa en esas cosas?

Al final lo que falla es la capacidad de implicación, de sacrificio, de negar lo absurdo y seguir adelante. Proyectos. Evitando las secuelas, recordándote a ti mismo, pensándote. Mira a tu alrededor, observa a esa gente que tarda años en recuperar su carácter afable después de una convivencia, observa como esas victimas del adocenamiento popular caen en depresiones, en la sutil violencia, ¿no lo notas en su forma de conducir, en como tratan a su pareja, en como arrastran los pies cuando vuelven del trabajo?

Mi caso es amputación radical, estoy demasiado dañado. Interrumpe mis reflexiones el despertador de mi vecino, no se nota ningún movimiento. Seguramente ya esta llegando tarde al trabajo, quizá a una cita con el médico. No puedo evitar pensar que yo llego tarde a la vida.

02 - Ain´t Talkin´Bout Dub by Apollo 440 on Grooveshark

jueves, 15 de septiembre de 2011

Te encontré en el anonimato de una calle, chocaste con mi mirada y seguiste adelante sin percatarte de nada.

Eras guapa, delgada, pechos pequeños pero con un buen culo, 1,70 de altura sin tacones. Alguien agradable, un buen polvo como dijiste entre risas, deslumbrándome con tu sencillez andaluza. Necesitabas sacar partido a tu cara con maquillaje y un corte de pelo muy concreto, pero mi única aportación era un cerebro lisérgico ansioso de entropía, no creo que pudiera o debiera ser exigente.

Y ahí te esperaba, en la estación de Chamartín, con esa mezcla de ansiedad o fe que producen este tipo de encuentros. Dos desconocidos esperando que las cosas fluyan, sin más argumentos que un mes de teléfono y dos encuentros por el skype. Un par de autocompasivos gilipollas que ríen y lloran a destiempo y siempre por cosas sin importancia.


Solo te quedabas una noche y nos dimos prisa con el romanticismo. No tenía ninguna presión, esta vez no importaba nada demasiado, te abriste ante mí como una flor bajo la lluvia esperando placer, solo tenía que recoger el premio… ¿demasiado fácil? No, el juego fue largo, marcando bien los tiempos para convertirme en tu reto, sin hablar de necesidades ni sentimientos, un baile ensayado de indiferencia. Tu vanidad disfrutaba más de la posesión que de la penetración y a mí no me interesaba llegar a tu corazón, solo las palabras rompían mi espontaneidad, pero gemías lo suficiente para hundirme en ese pelo largo azabache y dejarme llevar.

El segundo fue mucho mejor, la verdad es que resultabas mucho más inteligente en la cama que fuera de ella. Incluso con el tiempo podría aprender a quererte, un escenario aburrido pero relajado en el que no cruzamos las líneas tacitas de nuestras mutuas carencias, ¿Lealtad o sorpresa...?

Te dormiste abrazada a mí, simple tramoya, somos ya mayores para sobrecogernos por detalles mil veces repetidos. La nostalgia para ambos seguía ahí, aunque nos afectase de forma diferente. Te abandono como a un párrafo que me da vergüenza releer –sin metáforas- y dejo que mis falanges divaguen sobre cualquier tema, el éxito por ejemplo.

Si tienes un blog el éxito se basa en el número de seguidores y/o comentarios que devienen en muchas visitas. Pero es una pantomima, solo es una cuestión de marketing, otra red social de aduladores donde nos intercambiamos favores y spam, es una cuestión de tiempo no de talento. Y de sexo, mucho sexo reciclado en fotos, relatos, en mujeres bosquejando su promiscuidad con algún toque –espero- de realidad a flor de párrafo. La imagen de una vagina se folla literalmente años de letras en apenas una hora.

El éxito… quizá el tiempo, como padre de la verdad, pocos aguantan un buen ritmo más de un año. Quizá la existencia de un troll, sí, alguien que se tome los textos como algo personal, que nos odie, que nos escupa en los comentarios hasta que no tengamos más remedio que moderarlos. También sería entrañable un acosador o una groupie ofreciendo sexo, los decadentes espantamos el éxito, pero me consta que hay gente que disfruta de esas experiencias en este pedo virtual.

Pero a fin de cuentas todas las aguas fecales acaban desembocando en el mismo mar
Soy la anoxia que te provoca la realidad a bocajarro
Soy letras para adolescentes adictos al crack
Soy un medico demasiado amable cuando va a darte los resultados
Soy la sensación de fracaso que te hace llorar por las noches
Soy un cocainómano rompiendo billetes a Paris sin usar
Soy un accidente sentimental al que aun no puedes llamar puta
Soy tu nausea al soltar tópicos intrascendentes ante una sala vacía
Un mendigo que te mira desde la basura y te ofrece un trago
Una mente rota que no entiende el principito
La pasividad de una muñeca hinchable
Un condón roto mientras finges un orgasmo
Un molino de viento girando entre las piernas inabarcables de zorras indiferentes
Una esquela, un fundido en negro en versión original, un carnet de biblioteca caducado
Una chica que se queda embarazada por segunda vez de la persona equivocada
Soy ese gesto, esa palabra, ese puñetazo que destroza años de convivencia y que hace que la mentira ya no pueda mantenerse ni un segundo más.

Aúlla conmigo, que le jodan al éxito.

The Kiss by The Cure on Grooveshark

viernes, 9 de septiembre de 2011

No querían estropear su amistad con el sexo. Más tarde, para celebrar que estaban de acuerdo, se pusieron a follar.

Y pensaba, mientras iba en el metro de vuelta a casa, en el insomnio, que no encontraba la música adecuada en el Ipod, en musarañas, desencuentros, viajes a Dublín, pensaba que las palabras no tienen mucho sentido cuando no hay una acción real detrás.

Pensaba que mientras me mantuviera ocupado todo saldría bien, pensaba en Love Of Lesbian que estarán en Madrid el próximo martes, pensaba en mi cumpleaños, pensaba que el cumpleaños de la chica Octubre es mañana pero que es mejor la indiferencia simpática. Pensaba en mi trabajo de mierda, en Juanma que venía a visitarme la próxima semana, pensaba en todas las tías con las había estado


Pensaba en todo eso y en nada a la vez cuando de pronto la vi: tenía tu edad, llevaba un vestido blanco escotado sin adornos, no llevaba pendientes pero si un par de anillos que destacan sus manos esbeltas y juguetonas, porque sí, también tenía tu talento para seducir, todo su cuerpo reaccionaba en ese baile de cortejo perfectamente orquestado que desplegaba ante el alfeñique que tenía a su lado.


Tenía tu mirada brillante y ese gesto casual con el que te tocabas el pelo, sonreías mientras mirabas a un lado y luego, entornando los ojos, acercabas tu rostro un poco más. Tenía tu maquillaje sutil, ese balanceo de piernas y, aunque a primera vista no parecía destacar, brillaba, como solo pueden brillar las personas especiales. Me bajé justo cuando se dejaba besar y manosear por el gañán. Me dió cierta rabia.


Y pensaba, mientras caminaba a casa circundado por victimas de soledades parecidas a la mía, que moriré y no lo sabrás, morirás y no lo notaré, así es como funciona el mundo. Y aunque me gustaría enquistarme en ti como un héroe decimonónico, prefiero dedicarte solo unas líneas, prefiero decirte que echo de menos tu sonrisa y esa impostura con la que engañabas a todos menos a mí, que echo de menos tu voz, aunque no vaya a llamarte nunca a pesar de lo que te dije. Que resulta difícil olvidarte cuando tu nombre, como fetiche de invernadero, se empeña en perseguirme a diario -¿O soy yo quién lo persigue a el?-, ese nombre que mezcla olor a sal y a peonías.

Y de pronto me sangra la nariz, y si pensará como tú diría que es una señal para que pase a otro tema, quite las primeras canas de mi teclado y levante la persiana en busca de algún orgasmo nocturno. Pero cada uno es como es, de todas formas, ¿Qué podía esperar cuando a mí se me escapaba un te quiero y a ti solo una sonrisa?

No hay segundo asalto, pero a pesar de todo, esta noche, seguiré pensándote un poco más.

Segundo asalto by Love of Lesbian on Grooveshark

martes, 6 de septiembre de 2011

Me escribiste una carta para recordarme que me habías olvidado.

El puto concierto tenía la culpa. No era especialmente bueno, pero el cantante, que debía de estar tomando las mismas drogas que nosotros, arrastraba con su pasión a todo el público, disparando a matar contra mi sempiterna resignación y haciendo que olvidara que iba a cumplir treinta y cuatro. En ese momento no me preocupaba el infierno elegido, solo tenía ganas de tocarte, de follarte aquí mismo mientras las guitarras destilaban odio como espejo deformado del propio odio que sentía hacía mi mismo. Quizá solo era un producto indulgente de la falta de guerras propias o de empatía hacía la imagen del televisor.

Pero ahí estábamos los dos, sin enterarnos realmente de nada, viviendo la realidad de un presente que se deshacía como flecos quemados de neurosis, con un síndorme de Tourette provisional que nos impedía fijar nuestra atención en nada que no fuera físico, otra forma de suicidio más divertida, lo reconozco. Sin embargo la miraba y pensaba -puto cerebro-, que somos infalibles para elegir pareja, sobretodo cuando necesitamos a la persona equivocada. Porque es la adecuada para castigarnos, jodernos, humillarnos, y lo peor es que, a pesar de todo, seguimos colgados del limbo del amor porque creemos que es perfecta; supongo que yo también debo de ser subnormal.

O sea que fuimos a casa a castigarnos un poco más las venas, allí había más drogas, de esas que te dejan tan atontado que permites que te aten a la cama y te cabalguen. Miedo, sumisión, placer. Luego hay marcas en las muñecas, mordiscos a ras de hueso, pero no estas pensando en el puto kamasutra cuando follas, piensas en escupir en ese culo, rodearlo con tus pulgares y pulverizarlo con tu polla, y luego mantener el ritmo hacía su coño y su boca, a fin de cuentas de eso se trata: de actuar como animales, de eclosionar límites, de moverse, de poseer, de dejarse llevar, de abjurar y jurar amor mientras te llamo puta, de gritarte mi odio, de lacerarte, de jugar a ver quien jode más a quien, hasta que al final, con o sin ayuda, nos levantamos y seguimos nuestra vida como sino hubiera pasado nada importante.

Y es que no sucede nada importante, seguimos aquí, podemos coger la pistola y volarnos la tapa de los sesos y no cambiaría nada absolutamente. Familia, amigos, parejas y/o follamigas gimotearan brevemente, pero ¿están en nuestra cabeza cuando todo va languideciendo, sufren el fracaso cuando la polla no se te pone dura después de dos botellas, cuando vives como una mosca de fruta, poco y mal, alimentándote de podredumbre intelectual? No hablamos de un puto lapsus después de un día de resaca en un examen de matemáticas, hablamos de décadas de más, sin significado.

Decía Leonard Cohen que El amor verdadero no deja huellas, si tú y yo somos uno, se ha perdido en nuestros abrazos como estrellas contra el sol. Pero que esté bien expresado no implica que sea cierto, como me dice a menudo mi musa -escribes demasiada mierda edulcorada-, a lo que siempre respondo -es culpa tuya por llevar demasiada ropa.

Me duele el pene y no es por falta de santidad: llevo años sin hacer el amor. Aunque algunos me dicen que el amor es un articulo de lujo clasista, que no pierda el tiempo ahorrando y vaya a las rebajas.

Finding The Bomb by The Dust Brothers on Grooveshark

domingo, 4 de septiembre de 2011

La ira de Dios.

La vida es a veces indigna e inadmisible. El trabajo de teleoperador te hace sentir como un fracasado, pero si añadimos un cliente clasista insultándote durante cinco minutos podríamos entrar en el terreno de las florituras sobre muñecas sin pálpito. Pero no, hay algo que soluciona todo: el sentido del humor. Porque sabes que la política de seguridad de – ya sabéis para quien trabajo- es una mierda…una voz impostada desde mi móvil, un par de datos personales que tengo en pantalla y de pronto la línea de este cliente se ha dado de baja. Así sin más: con humor. Todo se dilata el fin de semana, y aunque ponga un par de reclamaciones si este personaje que trabaja de comercial no demuestra algo de modales, no podrá recuperarla.
Hay mucho sentido del humor en este mundo, una de mis reglas de oro es no joder a nadie que tenga acceso a mi comida o me la sirva. Y si es mujer menos todavía, cualquier muchacha sin escrúpulos y con la regla puede hacer cosas muy, muy desagradables. Estuve ahí, lo he visto.

Pero no era de eso de lo que quería hablar, bueno realmente no sé de qué quiero hablar, escribo sin más. Mi calle, el barrio entero, esta tomado por los colombianos, inmigrantes varios y sus putas escandalosas, groseras y toscas que gritan en cuanto tienen la excusa del alcohol, son las 03:20. Ellos viven la vida a su manera, es jodido que sea tan ruidosa, que impida a la gente dormir los fines de semana, gente que se enfada, que se ulcera, que pone denuncias mientras los ancianos mueren y dejan sus pisos vacíos para que el guetto se revigorice. Porque ellos siguen follando en los soportales, como perros que orinan en las esquinas marcando su territorio, con las sirenas de policía como banda sonora. Y al menos tenemos eso en común: nos importa todo una mierda.

La puta edad, ya no te ves en un parque haciendo botellón pasando frío mientras cantas canciones de Héroes Del Silencio para luego patearte medio Madrid y buscar el siguiente local gótico abierto. Pero de esa época guardo con cariño las quedadas con X. Era un tipo de que vivía fuera de Madrid y compartía conmigo la afición a desayunar vodka y desbarrar por los chats del irc hispano. Su última relación sentimental era a distancia y se estaba convirtiendo en puro masoquismo por lo imposible y lo frustrante. Tuvimos grandes juergas, sin duda, luego la distancia y las obligaciones fueron espaciando los encuentros. Pero siempre había algún cumpleaños, algún concierto de Iron Maiden, alguna excusa para verse y darse ese abrazo como sino hubieran pasado los meses y fuéramos vecinos de toda la vida.


Ahora, más de diez años después, X vive en Madrid. Me enteré de casualidad, no por él, sino por aquella chica de la que estaba enamorado que también, curiosamente, ha acabado viviendo con su pareja aquí. Quedamos hace unos meses y bueno, fue bastante raro, nos abrazamos, nos reímos, nos emborrachamos y luego nos fuimos todos a casa. No nos hemos vuelto a llamar. Las distancias en Madrid son grandes a todos los niveles, de lunes a viernes trabaja y el fin de semana se va a Salamanca porque allí tiene algo nada romántico. En eso, según él, sí ha cambiado. Sé también que miraba a esa chica como si tuviera algo pendiente pero, y perdonad la metáfora rebuscada, como si hubiera tropezado con los juguetes que extravió en su infancia cuya perdida tanto le hizo llorar y ahora no supiera muy bien que hacer con ellos. Sí, lo he dicho, ella tiene novio, pero hay lazos que no se olvidan.
Pero no, no hemos vuelto a quedar. La vida real nunca tiene conclusiones, solo puntos suspensivos que se extienden durante demasiado tiempo.

Un brindis por ti, de esa combinación que tanto nos gustaba de vodka, martini y algo más...

Historias prohibidas by Extremoduro on Grooveshark

sábado, 3 de septiembre de 2011

Existencia procrastinada, Otro post más...

Empeñarse en amar a la mujer equivocada es como tener una pistola siempre cargada en la mesita de noche los domingos de resaca…o los viernes…o los sábados, porque hay resacas que duran toda la vida. Es como caer y caer, y aunque es posible que haya mujeres que intentan detenernos, lo habitual es encontrarse con las otras, las que consiguen que la caída sea mucho más rápida y en el último momento saltan. Como parar al borde del orgasmo afligido por tus sentimientos de tartamuda, la comunión con la nada dentro de sonrisas baratas y caricias ebrias que apenas dejan arañazos en el alma reflejados en un patio de luces lleno de cadáveres.

Estuve pensando toda la tarde en ella. La única solución/placebo fue animarme a ir a la típica fiesta privada y recóndita que termina con dos o tres en una habitación buscando condones por el suelo. Llamé a varios amigos pero todos tenían planes: un curso de yoga, granjas ecológicas, viajes al Tíbet, una novia, una follamiga, una esposa, una puta…bueno, este ultimo dijo de venir pero una vez cumpliese sus horarios. Al final me temo, todo se reduce a tu camello, a tu puto proveedor de drogas, endorfinas sintéticas. Saqué el escaso dinero que me quedaba del cajero e hice negocios. Las peores resacas se solucionan así, espaciando los tragos con las rayas. Matemáticas elementales de drogadicto, sobretodo intenta que no se acabe todo a la vez...

Pero la fiesta era mentira -o quizá la mentira sea yo- y me quede en casa paseando a voz en grito por habitaciones de colores. Pero mis vecinos también tienen su propia droga: dosis de amor-odio bastante ruidosas, ahora golpeo, estrello, insulto…ahora te follo; me temo que los golpes repetitivos contra mi pared devienen de la segunda. Parece que mi querido vecino esta follando con la intensidad adecuada, aunque ella gime más de la cuenta, altisonante, como si tuviera quince años y estuviera descubriendo sus músculos vaginales. Es cargante porque produce envidia... o llevan demasiado tiempo o la droga dilata mi percepción. Tanta pasión solo puede concurrir en legado o legrado. 
Subo la música, aunque así no puedo escribir nada concreto, dos personas meciéndose con la mirada, dar de comer a las palomas del psiquiátrico, correr con los cordones desatados en un cementerio, alarmas sonando en alguna parte de mi cerebro, la misma canción triste una y otra vez, comprar dos entradas de cine e ir solo, así ad infinitum...aire como chicle; hubo un tiempo en que grababa las escenas de besos de películas antiguas, había agresividad en los hombres y cierto desasimiento sumiso en las mujeres, pero en esa entrega que tardaba en llegar se vislumbraba, a través de los velos de la censura, un cunnilingus prospectivo en blanco y negro.

Pero todo decae, la danza acaba...la interior y la exterior. Me tumbo en la cama y te recuerdo, una vez más, hambrienta y distante. Y cambiaría mis ganas, mis palabras desnudas, todo el calor de mi cuerpo, todo, por una tarde más contigo bajo la lluvia...y por otra noche para desvalijar tu cuerpo sin grumos literarios, para follarte hasta que recitases mi nombre en sueños y las despedidas solo fueran parpadeos sin memoria.

Famous Blue Raincoat by Leonard Cohen on Grooveshark

viernes, 2 de septiembre de 2011

El sexo es muy solitario sin ti, ¿Por qué eres tan zorra, Puta?

Es mejor reconocer los errores en voz alta: Te quiero. Ya me cobraré las deudas que tengo con tu cuerpo en una ocasión más propicia, por ejemplo cuando no te estés follando a otro. Te cedo el tatuaje de mi beso por un día, y mi aliento para siempre.

Pues aquí estamos, días que vagan sin acritud pero que se difuminan sin más potencial de cambio que la nostalgia de un mañana agotada de antemano. Como una muerte a latigazos que dura demasiado, como mendigos bajo soportales escupiendo su felicidad en cervezas picadas por el sol y libretas Moleskine. Contando con esa voz llena de arrugas como empujaron al amor contra la pared y se lo follaron sin permiso una noche de viento y espinas.

Y creo que compartimos las mismas alucinaciones porque bebemos la misma basura barata, visiones resacosas -y sin ánimo metafórico- de mierda cayendo sin parar, cantidades industriales que el cielo defeca sobre nosotros, un alud, una avalancha, un manantial que ahoga todo porvenir, que causa nausea y enfermedad a su paso, sin ningún lugar donde esconderse, golpeando como granizo sobre las casas, separando a los amantes y desfigurándolos, creando riadas como una última eclosión de los desastres naturales.


El límite del juicio estético es el asco, como pensar que nuestra felicidad depende del agravio comparativo que ejerce la melancolía de nuestro alrededor, como ahorrarte una relación sin sentido al comprobar que el sexo es una mierda en la primera cita.

La soledad, como muchos dicen, es una puta barata, y de eso quería hablar: me he enamorado de una puta. Y antes de que empecéis a borrar mi página de los favoritos no me refiero a una mujer a la que considero una puta, no, no, de verdad, es una puta, de las que cobran desde el principio.

Me encontré con ella en un club que hay a cincuenta y dos segundos de mi casa, nunca me había atrevido a entrar porque lleva ahí media vida siendo una metáfora viva de lo casposo, con esos neones rosas y ese cartel de dos mujeres bailando. Pero era una de esas noches en que la idea de utilizar mi cuerda de saltar a la comba para ahorcarme estaba siendo mas nítida que de costumbre. O sea que franqueé el escenario. Y que decir: ahí estaba Ella, nada emocionante en su físico -debía de tener diez o quince años más que yo-, pero había indiferencia, dejadez en su mirada. No es un lugar para buscar retos pero me senté en la barra a su lado y le invité a una copa, que es la forma más natural de romper el hielo y el precinto del condón.

Rorschach: Dejando aparte que tienes unos ojos miel exquisitos y que este vaso esta muy sucio… ¿Tienes hijos?
Puta: Mi instinto maternal desapareció con mi padrastro, pero también es cierto que nadie ha conseguido tentarme estando vestido.
R: Todos son decisiones a fin de cuentas, Radiohead o Vivaldi, escupir o tragar, follar o morir, una elección siempre contamina el resto. Por ejemplo: elijo terminar estos preliminares y follarte, ¿Cuánto cobras?
P: Siento desilusionarte pequeño alfeñique, pero solo hago mamadas, eso sí, felicidad en estado puro, y me temo que escupo…
R: Mierda, que extraño, tengo poca experiencia en estas lindes pero veo raro que tus clientes se conformen con una simple mamada...
P: De simple nada, mis mamadas son transcendentales, estratos de felicidad convertidos en arte, pura metafísica de mi lengua saboreándote, envolviéndote, te hago el amor con mi boca de forma más intensa que con mi coño.
R: Joder, me dejas impresionado, lastima que no puedas chuparla y hablar a la vez, ¿Dónde están los reservados?
P: En este local elegimos nosotras y mi arte felador no esta disponible para cualquiera.
R: Mierda, ¿es por mi cara?
P: No, termínate tu copa y vete. Inténtalo en otra ocasión.

Se levanta y desaparece con ese gesto noble del que da por hecho que la visita ha durado demasiado y deja en manos del criado sacarte del salón.

Y así fue, mis queridas contertulias, como me he vuelto a enamorar. Rasgos comparte con las pretéritas aparte de la vocación: esos labios altivos de cereza y el pelo largo ensortijado crean un cuadro de turbadora belleza femenina.

Pero así somos los hombres, buscando a quien dedicar las derrotas, iluminando el camino con el semen del amor. 

Hellraiser (VNV Nation Remix) by Suicide Commando on Grooveshark