Podría hablar de la cabalgata de reyes, de ciertas
mujeres que solo funcionan como posibilidad. Pero al final acabaría hablando de
soledad. La soledad es el olvido del tiempo, un Día de la Marmota al revés, la sensación de que estar vivo es el
precio de algo que nunca quisiste comprar. Intentar atravesar la fría y dura
costra mental para solo encontrarte el vacío de un zombi obsesionado con
idioteces. Ni siquiera la tregua de ilusión que supone un billete de lotería –que
incluso premiado no cambiaría lo esencial- puede provocar algo de cadencia al golpeteo
de estos dedos agarrotados sobre el teclado.
Pensaba en Henry Darger, escribiendo un
libro de más de quince mil páginas durante treinta años. Solo, aislado, yendo a
la iglesia cinco veces al día. También era ilustrador, acuarelas de niñas con
pene siendo torturadas por soldados complementaban su inmenso libro. Un libro
con dos finales. Lo del pene en niñas no se lo toméis a mal, era virgen, no
había visto a ninguna mujer desnuda. Obsesivo religioso. Y basurero. Creo que
se llama arte marginal. Un exponente.
También recuerdo a William
Schmidt, quiso explotar una mina de oro, el problema es que estaba a más de
treinta kilómetros de un núcleo habitado. Se le ocurrió la genial idea de hacer
un túnel con dinamita, atravesar la montaña, y así ahorrarse los continuos
viajes por el peligroso desfiladero. Al final esta empresa se convirtió en una
obsesión que le consumió durante treinta y ocho años. A pesar, añado, de que el
ferrocarril finalmente empezó a cubrir esa ruta. Vidas dedicadas a algo...
El problema de Drive
es que la protagonista me recordaba a ella; los clips en la cabeza, la mirada, la forma de la cara. Y en la tragedia.
Poneos en situación: se aman. Aun no lo han
mostrado explícitamente por una serie de circunstancias pero está claro que es
así. De pronto entran en el ascensor. Hay un matón dentro, ha sido enviado posiblemente para
matarlos. Él se percata y en vez de seguir estereotipos, de hacer cualquier
heroicidad, desplaza lentamente su mano para protegerla a su espalda, se
gira y mientras suena una música perfecta, mientras los gestos se ralentizan,
mientas la iluminación cambia…la besa. Y es uno de los besos más románticos y
trágicos del cine, porque es un momento que los dos han anhelado con silencios,
con miradas, con pequeños gestos durante toda la película, y aunque ella se
entrega totalmente para él es diferente, para él es una despedida. Después de
un momento eterno se separan, ella todavía sin poder desprenderse de su mirada.
Y justo ahí la realidad nos golpea: el matón empieza a moverse y él reacciona matándolo de forma brutal. Ella le
mira horrorizada y desaparece. No solo es una despedida, es la disolución de la
imagen que tenía de él, el fin de cualquier oportunidad aunque salgan con vida
de todo esto. Han creado magia, algo especial, y se ha reducido a cenizas en
apenas unos instantes. Eso es talento, trascender la irrealidad del cine y conseguir
que te emocione.
Me voy a acostar ya, sólo hay canciones de suicidio,
ganas de beber y masturbarme. También ganas de romperte las bragas y
arrodillarme entre tus muslos de nuevo. Transformar tus jadeos en música. Lamerte al principio despacio, en espiral, luego con ansiedad, hambre, sed, locura, como si tu clítoris se
estuviera asfixiando. Humedecerte con mi aliento, aplastarme contra tu sexo y regodearme
en él, la simple táctica –o estrategia- de dar sentido a mis días con tus
orgasmos.
Porque reconozco que suelo escribir sobre ti. También
sobre mujeres que no existen –y sobre algunas que no deberían de existir.
Porque tú brillas, y aunque también eres atractiva -aunque eso no deje de ser
un canon publicitario, carne ubicada en el lugar correcto-, lo importante es que
tu brillo es capaz de transformar folios en blanco en poesía, de retorcer la
banda sonora de mis sentimientos con el sonido de esos tacones que siempre –desgraciadamente-
escucho alejándose de mí. Siempre fuiste mi otoño antes de dormir, y por eso
hay una sombra mía en el centro de París, para que cuando vayas sin buscarme no
te deje echarme de menos.
Como diría Oliveira “La soledad es esperarte”, ese bucle de paraísos perdidos en el que me conformo con atar tu ropa interior, como vino aguado, a mi alma.
Buenos días, lamento que te sientas tan solo. No se si te lo dije una vez pero quizá estar sin Ella es tu sino y es motivo de moverse en otra dirección.
ResponderEliminarA lo mejor me meto en zona de barro, pero total, son las 8,30 y no se me ocurre otra cosa.
Muas.
Sigo leyéndote. Imposible añadir nada. Está claro que contigo sólo cabe el "Si lo que vas a decir no es más bello que el silencio, no lo vayas a decir". Siempre mi admiración.
ResponderEliminarBulowski, blablabla. Canciones de ultratumba, blablabla. Lo que pudo haber sido y no fue, blablabla. Cállese, blablabla.
ResponderEliminarjoder.
Tú serás muchas cosas pero mediocre no.
ResponderEliminarInteresantísima entrada.
Yo también detesto ese "yo".
ResponderEliminarMe viene la cabeza el capítulo 93,"Pero el amor, esa palabra...Moralista Horacio"
Mmmm con que tranquilidad he leído esta entrada. Hacía tiempo que no leía una entrada empezando por el principio y terminando por el final (siempre lo hago al revés, no se por qué) y sin saltarme nada.
ResponderEliminarMe dejas confusa, me abruman esas ganas tuyas de sentir, de luchar contra el mundo. Que idealista eres, y que decadente. Cuanto sabes de todo y que ordenado, se nota que editas y que repasas.
Y ya no tengo nada más que decir...
Besos :P
Buenos días. Me gustaría enviarte este comentario en forma de regalo de Reyes. No tiene lazo rosa, ni está envuelto en papel de fantasía, ni tampoco es de Ella, pero ábreme los ojos y léeme por un momento como si yo fuera La Maga:
ResponderEliminarEl primer párrafo me deja pensando en "la coma" y en las palabras que Cortázar le dedicaba en "La coma, esa puerta giratoria del pensamiento" donde nos plantea leer y analizar la siguiente frase "Si el hombre supiera realmente el valor que tiene la mujer andaría en cuatro patas en su búsqueda".
Si usted es mujer, con toda seguridad colocaría la coma después de la palabra mujer.
Si usted es varón, con toda seguridad colocaría la coma después de la palabra tiene.
Pero me gusta pensar que Cortázar quería como siempre ir más allá de la broma, más allá de la realidad, por eso cuando pienso en el significado de estas palabras, me doy cuenta de que da igual dónde esté la coma, y entonces me voy a tu penúltimo y último párrafo, para llegar a la dulce conclusión de que Ella y Él se buscan mutuamente al margen de donde caiga la coma, porque uno no tiene sentido sin la existencia del otro... y también viceversa (que añadiría Benedetti).
A veces está bien darle una segunda oportunidad a la vida y pensar que tal vez pueda aparecer La Maga en la vida de Satie o una Suzanne en la vida de Oliveira. Es difícil encontrar mujeres así pero vale la pena vivir intentándolo y no quedarse anclado en el pasado. Hoy te animaría a leer dos poemas: "No te rindas" de Mario Benedetti, se puede decir que es mi padrenuestro y "No te salves" que sería mi credo, porque soy agnóstica sí, pero todos necesitamos creer en algo.
Aunque si realmente fuese La Maga o Ella o Irene o ¿?... No diría nada y me quedaría a vivir eternamente en el antepenúltimo párrafo.
Besos
PD:De las dos historias enlazadas, me ha gustado muchísimo Henry Darger, pero mucho, mucho eh...me lo tomaré también como un regalo.
Advenedizo: No sea tan empalagoso en los comentarios, que ya sabe usted que solo me gustan las vaginas, no querrá empezar el año con un rechazo ¿no? xD
ResponderEliminarYo me he enamorado del penúltimo párrafo, aunque la brisa templada y sosegada, aunque solitaria y algo apesadumbrada, que recorre el post entero me ha dejado un sabor de boca casi dulce. Casi. Aunque, si de sabores se trata creo que tú y yo preferimos algún otro, por muy buena literatura que ingiramos.
ResponderEliminarEn fin... Se acabó la Navidad.
Juka: Bueno, sí, te reconozco que hay noches que me siento bastante solo y eso me lleva a pensar en otras cosas. Pero de momento prefiero quedarme quieto. Veo por las horas que estabas entusiasmada por ver tus regalos de reyes ¿eh? Espero que pases un buen día. Yo luego me voy a trabajar…xD
ResponderEliminarAda: -sonrisa- Gracias por tus palabras y por leerme.
Pseudosocióloga: Vaya, me alegro que piense así. Debe de ser de los pocos comentarios que no se mete conmigo, ¿quedamos para cenar?
Un saludo.
Alalai: Rayuela da de sí, es cierto, los capítulos en Paris son magníficos, incluso la ruptura. Todo. Ese “yo” buff he cambiado totalmente el sentido de frases para no ponerlo.
Beso de roscón de reyes.
Lunática: Me ha hecho gracia eso de empezar por el final…a ti el tema spoiler te debe dar exactamente igual asumo.
Mi forma de escribir fíjate tú, es bastante anárquica. Primero escribo un montón sobre mil cosas, con música alta, con interrupciones, leyendo otras cosas. Luego con ese núcleo me dedico a editar, cortar, borrar. Esta es a veces la parte más aburrida o la mejor, depende de las ganas. Buscar el orden en la entropía pero respetando la novedad.
Lo de luchar contra el mundo, idealista, no sé, me emocionó la película, no hay que exagerar ¿no? xD
Besos guapa.
A veces Eau: Joder, vaya reflexión, es casi un post.
Lo de las comas en mi caso, al igual que los párrafos largos, es por mi rapidez de lectura, leo en mi cabeza todo el texto y nunca creo que sean necesarias, por lo que las pongo de forma artificial, cuando creo que “deberían” de ponerse.
En los demás tienes razón claro, Cortázar detrás de toda su enorme cultura era un bromista que intentaba escapar de la seriedad de la novela, de su encorchetamiento.
Naturalmente Ella solo existe por El, porque nadie es especial al margen de la idealización, de la frustración del enamoramiento, del platonismo. En el fondo es un juego de espejos literario, parece que hablo de Ella, pero solo hablo de mí, de mi soledad, dándome entidad aunque sea con su ausencia. Ausencia irreal claro, porque en el fondo Ella soy yo.
Me animaré con los poemas, supongo que Táctica y Estrategia también será de tus favoritos.
Lo de esperar a La Maga, ¡claro! El 2012 es una tregua sentimental, por lo menos durante unos meses, pero si aparece seré el primero en intentarlo.
Gracias por tu comentario. ¿Te han gustado las historias? Genial. Quería extenderme más, hablar de si es mejor tener algo estúpido por lo que vivir o no tener nada, etcétera. Pero me venció la pereza.
Un abrazo guapa.
La manía que tenemos de idealizar esa imagen porque no podemos palparla. Sólo necesitamos que nos abran los ojos para ver la realidad y avanzar con el dolor sobre nosotros. Es más fácil no cuestionarnos nada, que aceptar la realidad.
ResponderEliminarsanta tecla que maravilla!
ResponderEliminarme postro a sus pies
El haber descubierto a Dager gracias a ti es algo que te agradeceré de por vida!
ResponderEliminarBenditas esas noches tuyas que te hacen parir letras como éstas, yo aplaudo y me piro a tomar aliento, brutal.
ResponderEliminarMuy bello... "la soledad es esperarte" me gusta la música suicida... te dejo una por aquí que me ha recordado a este texto... no sé porqué... http://youtu.be/zXQvPwYYVBI
ResponderEliminarUn abrazo con ansias de compañía.
Ella es tu soledad, como en Lost in Translation :D
ResponderEliminarQué buen Spoiler, al final tendré que verla.
Saludos!
Sí. Táctica y estrategia es de mis favoritos y esa, y no otra, es la razón de que al leer el antepenúltimo párrafo se ma hayan caído las bragas al suelo. Chao.
ResponderEliminarHenry Darger un zarpado. Como bien dijiste es un artista marginal, un outsider. Ese libro debe ser una locura.
ResponderEliminarEn cuanto a ser obsesivo con la escritura, bueno, eso va en cada uno. El tema es que escribir, más allá de ser un placer, es un trabajo en cierto sentido. Requiero esfuerzo. Mucho y del bueno.
Y Drive, qué película. Esa escena del ascensor es la mejor, sin dudas. Rompe con todos los moldes. De todos modos, es una peli con demasiados altibajos. Las pausas a veces son exageradas, pero aunn así buen filme el del danés. Es la puerta grande.
Abrazo
Fui a verla con una expectativa sobrealimentada con las buenas críticas y por tu blog... Me encanta el uso genial de los silencios en la película y ese momento. El ascensor. Ese instante de perfecto romance, el gesto protector, suave pero firme, la música, la " cámara lenta"... Y como se destruye en un segundo.
ResponderEliminarEs como una metáfora de la vida.
Un buen regalo de reyes! me ha encantado. xD
ResponderEliminarBesos.
Perdonad, pero con la moderación me hago un lio con los comentarios que contesto y los que no.
ResponderEliminarSMI: Sí, se acabó la Navidad. La verdad es que me puso algo triste. Los dos tenemos los mismos gustos, te doy la razón, además, hace tanto tiempo de la última vez. Solo me queda la buena literatura para recrearme me temo.
Ardid: Así somos, vencidos, huyendo del dolor. Demasiado humanos en el fondo.
Un abrazo.
Adriana: incorpórese por favor, usted solo se tiene que arrodillar para otras cosas, y me temo que estamos demasiado alejados…xD
Hay muchos personajes como Darger a nuestro alrededor, me alegra que te haya fascinado como a mí este personaje.
Un abrazo.
CalmA: Prefiero las noches en compañía, aunque vuestros comentarios diurnos compensan con su paliativo. Coge aliento y vuelve.
Un abrazo.
La que canta con lobos: Gracias por la recomendación, ya sabes que me encanta. Y sí, la soledad, en el fondo, es esperarte. En su ausencia.
Un abrazo también para ti hermosa dama.
Julieta: Otra película inolvidable, échale un vistazo, no cuesta nada, la red provee.
Abrazo.
A veces Eau: ja, ja, creo que hace falta mucho más para eso, pero agradezco el cumplido. Un enorme beso.
Sigma: Fíjate que el otro día discutía con un amigo del tema de las pausas, por ejemplo la del plano final del coche. Él la había visto en el cine, su experiencia había sido más real, yo, al verla en mi casa, con un par de parones para escribir y comer quizá adulteré la experiencia. Pero la he vuelto a ver, una semana después y me volvió a dar la misma impresión: las pausas, los planos largos están medidos con un talento impresionante. No hay nada al azar.
Es cierto, la buena literatura da trabajo, pero también conlleva aplauso. Todos podemos escribir en medios más o menos anónimos, pero sin duda, para tener ese aplauso sincero debes de esforzarte, no vale con la escritura automática. Es como leer un libro complejo: la satisfacción o el placer de su lectura no se puede igualar a leerte el último de Lucia Etxebarria. Quid pro quo.
Un saludo.
Ficticia: Así es, me alegra que no salieras decepcionada, para mí fue mayor el impacto porque ni siquiera conocía al director, iba a ser otra de esas películas que punteo estilo fast to furious…imagínate mi sorpresa. Buen final de año.
Chatnoir: le falta el lacito, espero que supieras perdonármelo.
Beso.