El alcohólico solitario
El adicto a la cobardía
El que vomita espejos
sobre un palacio genital
El fruto del árbol que
sabe a ajedrez y vino tinto
Una ambulancia ardiendo
ante un público impasible
El que pulsa el botón rojo
y se inventa una vocación
El soldado que se negó a
seguir a Alejandro Magno
Más allá de su victoria
Yo, el que divide todo en
dos:
Conmigo o feliz
Poesía o amor
Naufragio o equilibrio
Herida de orgasmo o luna
rosa
La decadencia o las
paredes de cuchilla agitándose sobre nosotros
Y digo nosotros y me
extraño
¿Quién es nosotros?
Y el pájaro azul canta y
observo de cerca la palabra amor
Y sonrío al darme cuenta
Que si escribo es por ti
Porque tú, mi niña de
invierno pornográfico
Eres lo único que puede
salvarme
Por eso ven, ven aquí, ven
conmigo
Follemos detrás de los
relojes
Y demos un golpe de estado
A todas las cosas imposibles.
A todas las cosas imposibles.
**
Y si queréis escucharme recitándolo -con voz enferma y decadente- pulsar en el siguiente enlace:
:) el final ❤ ❤ ❤ ❤ ahora voy a escucharlo otra vez (y la imagen es preciosa) un beso amor
ResponderEliminarNo estoy para escuchar nada a estas horas, pero te creo.
ResponderEliminarBesos y Feliz 2015.
Y que el baile te resulte agradable con la afortunada. Un saludo sin alcohol.
Sublime. Y yo antes siguiéndote solo en ask... ¿Qué sucede en esta aletargada cabeza?
ResponderEliminarSaludos afectuosos. O lo que sea.
Ah, y feliz 2015, que es lo que se dice. Y, bueno, tus respuestas son buenas, así que te lo deseo también en serio. Eso.
ResponderEliminarAcabo de descubrirte por pura casualidad y menos mal que lo he hecho. Chapeau por tus textos y por tus gusto literarios.
ResponderEliminarMe quedo regodeándome un rato en la decadencia.
Beso, Rorschach.