miércoles, 10 de octubre de 2018

Una reflexión sobre VOX y el resurgimiento oficial del fascismo en España.

Ayer en La Sexta escuché a Jorge Verstrynge negar que VOX tuviera alguna posibilidad electoral. Se refería a que todos los votantes de esta formación estaban dentro de Vistalegre escuchando el mitin de su ínclito líder, que fuera no había más. Y que si el PP y Ciudadanos seguían endureciendo su discurso frente a la inmigración y los independentistas, no había posibilidad de crecimiento. Añadía una cuestión interesante: VOX no son populistas, tienen una ideología muy concreta de la que presumen sin pudor: son católicos monárquicos, reaccionarios en género, liberales en lo económico y defensores de la fe española. En referencia a VOX Pablo Casado también comentó ayer que él tenía una excelente relación con Santiago Abascal, que compartían muchas ideas […] y que era una derecha nueva que había que respetar. Ninguna crítica más allá de intentar optimizar esfuerzos por el voto útil y concentrado. A mí lo que me preocupa de todo esto es que VOX se convierta, después de las próximas elecciones generales, en un partido bisagra, es decir, aquel que no tiene la fuerza suficiente para llegar al gobierno pero resulta indispensable para que los partidos mayoritarios consigan mayoría parlamentaria; por poner un ejemplo cercano: la CUP en Cataluña, que con cinco míseros escaños tienen capacidad para alterar la agenda política a su antojo.

En cualquier caso lo interesante de todo esto es reflexionar sobre cómo una formación como VOX abiertamente xenófoba, homófoba, antifeminista y ultranacionalista ha conseguido reunir a más de diez mil personas este domingo en Vistalegre. Porque aunque Verstrynge le quite importancia hace falta bastante organización, dinero (consiguen más de  1.2 anuales solo en donaciones) y masa social para conseguirlo. Creo que hay varios factores:

El independentismo catalán no ha sido el factor más importante pero es cierto que ha convulsionado al nacionalismo español, La vía unilateral decidida por el sector independentista ha polarizado a su antagonista, precursora del lamentable “A por ellos, oe”. Que Torra y los suyos persistan en esa utopía no hace sino radicalizar las posiciones: a más persistencia, más resistencia. Pero en España hay miles de personas que no dan tanta importancia al conflicto catalán y, sin embargo, simpatizan con la extrema derecha; se nota, por ejemplo, en la resistencia a que saquen a Franco del Valle de los Caídos, con la excusa de no reabrir heridas. También hay que tener en cuenta que en el resto de Europa florece la ultraderecha en países sin conflictos identitarios. Primero fue Polonia, Suiza o Dinamarca, y luego, Francia, Alemania, Austria o Italia. Al otro lado del Atlántico Trump se erige como un ídolo para la ultraderecha, un outsider que habla de proteccionismo económico en un mundo globalizado: primero su patria, luego los demás.

Explica Gramsci que a través del concepto de nación las clases dominantes generan en el pueblo un sentimiento de identidad en contra de un enemigo exterior, y que, de esta forma, el obrero se derechiza exaltando la patria. La gente no vota necesariamente por sus intereses. Vota por sus valores. Vota por aquellos con quienes se identifica. La sensación de incertidumbre, la desigualdad social y el miedo al futuro ha empujado a mucha clase obrera a encontrar cobijo en un discurso que promete mirar primero por la patria y luego por quienes vengan de fuera, que promete devolver las ayudas destinadas a los extranjeros al pueblo español y que quiere restringir las fronteras, evitando el colapso del Estado de Bienestar. La ultraderecha ofrece una hoja de ruta sencilla, con soluciones concretas, fáciles de asumir. La aporofobia, el miedo a los pobres, se viste de xenofobia.

La izquierda lleva décadas sin tener una solución real, su discurso ni seduce ni aglutina, por tener no tiene ni siquiera ni un atisbo de autocrítica. Se enarbola en una superioridad moral que lo único que consigue es lastrarla y alejarla de la realidad y de sus votantes. Ha abandonado a la clase obrera, y la clase obrera ha respondido igual. La solución sería clara: alejarse de esa caricatura que la enmarca en luchas absurdas, bajar a la tierra, a las cuestiones reales que le importan a la gente, aparcar la guerra de siglas y de poder, e intentar afrontar su espacio político desde la pedagogía y la pluralidad. Pero no lo hacen, no reaccionan.

            El auge del feminismo, la conquista del espacio público por parte de las mujeres, el #metoo, el éxito del 8M, las manifestaciones por la sentencia de la Manada, Leticia Dolera y sus fastuosas entrevistas, machete al machito, mansplaining, Todos los hombres son potenciales violadores y agresores, la opresión del heteropatriarcado como respuesta a todo, etcétera, ha provocado que muchos sientan que la ultraderecha es el refugio perfecto para realizar una enmienda a la totalidad del movimiento o, como mínimo, para no estar constreñidos en el silencio pusilánime del progre de izquierdas.

            Por último añadiría la crisis del PP: demasiada corrupción, demasiado saqueo institucional. Hay muchos que creen que Rajoy ha sido un líder blando incapaz de plantar cara a los independentistas. Y el relevo de Casado (o Rivera) yendo a degüello a por el segmento más duro de sus votantes, radicalizando su discurso, quizás llega tarde. Puede que el gatopardismo ya no engañe a tanta gente como antes.

No sé si VOX acabará en la irrelevancia o será un importante arbitro político, prefiero no hacer pronósticos porque me suelo equivocar más que Verstrynge. En realidad está entrada tiene la intencionalidad de advertencia propia y ajena: hay que tomarse en serio a VOX, también se ridiculizaba al votante de Trump, a ese obrero de derechas, y puede que repita como presidente en 2020. No volvamos a subestimar la capacidad que tiene el fascismo para normalizarse e integrarse en la sociedad. Es fácil decir que el votante español es tradicionalmente de centro, poco aficionado a los excesos, pero nuestra sociedad siempre ha vivido entre los fórceps de la Iglesia y la Monarquía. Luego han venido cuarenta años de Dictadura y una transición que sirvió de tabula rasa para víctimas y verdugos. Y el pueblo ha seguido agachando la cabeza ante cualquier simulacro de Democracia u orden social que le vendían. Ahora llega este discurso simplista, burdo y visceral, ¿y nadie piensa que es viable que pueda calar entre la población más deprimida y precarizada? Ay, cuánta ingenuidad.

Hay que conocer al enemigo, por eso dejo una entrevista que realizaron a Santiago Abascal antes del mitin en Vistalegre. No estoy de acuerdo con su discurso, pero es uno de los pocos políticos que resulta creíble, es decir, que tiene una ideología real y no tiene pudor en defenderla abiertamente. Nos puede resultar un argumento viejo apelar a la bandera, pero en realidad, aparte de la religión, es uno de los pocos pegamentos sociales que funcionan en la actualidad.

7 comentarios:

  1. Pues a mi me has dejado pensando. Y también lo pensé oyendo a Verstrynge sobre el análisis que hizo de VOX en Al rojo vivo. Me he quedado enganchada con eso...pensando en eso de la bisagra...ja ja. Me río pero no es para tomarlo a broma. Que Aznar, hablando catalán en la intimidad...llegó a la Moncloa. Aviso para navegantes.

    Y te digo más "te digo una cosa" ( que es lo último de las frases hechas ja ja ja), que me he maravillado, una vez más, de lo bien que escribes y de lo bien que explicas las cosas. Y es que si la gente, en general, se parase a pensar un poco más en los tejemanejes de éste sistema democrático ¡cuánto podríamos mejorar!

    Y nada más, que muchas gracias y un beso enorme.

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    1. Ahora con el móvil en cualquier momento que tengas de ocio puedes pasar leer un rato en Twitter y leer los periódicos digitales y así estar más o menos al tanto de lo qué sucede, el problema es que no se contrasta esos titulares, no tenemos sentido común ni crítico para sortear las fake news y a los palmeros mediáticos. Y claro, como además solo leemos a “los nuestros” tenemos una visión de las cosas bastante reduccionista. Si tuviéramos más memoria y fuéramos más críticos sería fácil desvelar todas las desvergüenzas de los políticos, sus mentiras, sus pantomimas, sus ideas programáticas que quedan reducida a la nada en cuanto llegan al poder. En realidad somos un pueblo de idiotas, analfabetos funcionales, que nos manipulan como siempre, con el «pan y circo». Naturalmente también están los que por pura desidia y decepción pasan de informarse e implicarse, hasta los que solo piensan en sobrevivir y pagar facturas.

      Con todo esto lo que quiero decir es que VOX tiene posibilidades de salir adelante y tener su cuota de poder. Su discurso es franco y directo; su líder representa el hartazgo que tienen muchos con el buenismo progre de izquierdas. ¿A quién quieren convencer de que es bueno que haya inmigración porque serán ellos los que paguen nuestras pensiones? A ver, que la inmigración que entra es para trabajos precarios, que hay más de tres millones de españoles en paro, que esas pensiones ya están sufragadas por los impuestos de nuestros padres, y si no hay dinero hay que pedir explicaciones de dónde está. Entonces viene alguien que dice que no, que primero los españoles y luego los demás, y hay muchos que están cansados de convivir en guetos con inmigrantes, que tienen problemas para conseguir trabajo y subsidios… y les compra el discurso, se lo tragan hasta la campanilla. Es normal. La clase media ha desaparecido y sigue en crisis. En realidad tú da al pueblo un enemigo y ya tienes una sociedad politizada. Somos así de esclavos de nuestras miserias. Pero bueno, que me enrollo y me repito.

      Ya veremos que pasa, es lo único bueno de todo esto, que siempre hay algo que nos puede sorprender, aunque sea para mal. Un abrazo.

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  2. Que bien escribes macho, a mi me aburre la política, paso de los titulares casi siempre en los periódicos, mi hiperactividad no me permite perder el tiempo en asuntos así de aburridos, con fantoche tan deprimentes, demagogicos y tal...
    Ya tienen luego la sección de deportes para embaucar a no votantes como yo...
    Por otro lado el fútbol ya no me interesa como antaño, es una pena, con ese circo desconectaba al menos un par de horas de vez en cuando, ahora la hiperactividad se incremento y no puedo seguir con interés casi nada que requiera algo de atención en televisión...
    Lo que me choco ayer es el nuevo programa de la 2, creo que se titula la hora musa, ahora que están los socialistas arriba ya vuelve la programación progre y enrollada... Xddd
    Con el bunbury como megaestrella invitada y adalid del cambio???...
    Xdddd...
    O soy un conspiranoico o esto huele a la misma mierda de siempre...
    Llevamos ya democracia y televisión demócrata como para no dudar de algunos de estos tipos:
    Alaska, loquillo, bunbury, Raphael,
    Que pasa que no da más chicha la fábrica de estrellas ok
    Que me voy a morir viendo a la puta Alaska toda puta vida como pálida y esperpentica pantomima de la transición?

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    1. Le suelo dedicar mínimo dos horas a este tipo de entradas, buscando enlaces, repasando, corrigiendo, añadiendo más información que encuentro en otros artículos, intentado expresarme de una forma sencilla, amena, pero sin perder calidad... Se podría decir que no tiene ningún mérito, que solo es cuestión de tiempo, al menos es como lo percibo yo.
      En mi caso no puedo pasar de la política, es como una mala costumbre, puedo estar días sin informarme, pero enseguida volver a ponerme al día. Es algo absurdo, masoquista, como si supiera que van a hacer un ERE en mi empresa, y leyera todas las semanas los comunicados de los sindicatos; nadie se moviliza, solo hay información, muchas veces ni siquiera eso, ¿sirve de algo? Bueno, quizás para ir buscando otro trabajo, para prepararme para cuando llegue el día del despido saber que tengo que poner “No conforme” y buscarme un abogado, pero todo con tranquilidad. Entiendo que hay gente que leer de política le pone nervioso, le indigna. Yo me he preparado para lo peor, para ese ERE, solo leo para saber cuándo y en qué circunstancias se va a producir xD

      A mí es que siempre me ha aburrido el fútbol. Y lo he intentado, no soy prejuicioso. Pero es que hasta cuando ganaba la selección yo era el único que decía: “Joder, ha sido un coñazo de partido.”. Porque lo había sido, lo único bueno siempre era el resultado, que a veces era un empate a cero y tanda de penaltis. La frustración actual se produce porque ya ni siquiera ganamos. Con La Liga pasa otro tanto igual, ¿nadie se cansa de ganen siempre los mismos? Barcelona y Real Madrid, por favor, es que entiendo la pantomima unos años, pero ¿décadas? Me parece infumable. Me gustaría emocionarme, pero con estos mimbres es imposible.

      He buscado el programa, y me veré más adelante la entrevista a Bunbury, es un tipo que siempre me ha gustado, no puedo evitarlo. Desde HDS y algunos discos que ha compuesto después, se ha ganado, sino mi respeto, sí mi curiosidad. No veo la televisión, pero tienes razón: llega el PSOE y en cuatro meses ya tenemos chorradas de ese tipo, pero al menos son espacios de música.

      ¿Hiperactividad? Vaya, es una putada lo de la falta de concentración, ¿hay algún medicamento para controlarlo un poco? Porque sería ideal poder canalizarla. Yo, como te he dicho en alguna ocasión, adolezco de una desidia estructural, cada movimiento y actividad requiere del triple de esfuerzo que para una persona normal. O por lo menos esa es mi impresión.

      Un abrazo.

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  3. Si, el fútbol ya no es competición entre deportistas, es algo que mueve mucho dinero, es bestial el trastorno y la tiranía que ello conlleva...
    Antaño los futbolistas al menos lucían con aspecto más desaliñado, las melenas hipiies de la naranja mecánica, el bigote decimononico de Vicente del bosque, esa pinta de narcotraficante del colombiano Valderrama, ahora son además modelos que venden y visten al chaval de 20 años que tras dar el palo a la abuela y con las Nike de 100 pavos de Cristiano entra a un salón de juego a apostar cualquier evento deportivo...
    A mi bunbury me gusta, su música y tal, aunque le perdí la pista en las consecuencias ya que últimamente sus canciones me duelen, parece que escriba para mi y me abren cicatrices...
    Te caería bien pedro Andreu, el batería de los heroes, es mi héroe favorito, xddd
    Si, es una putada esa hiperactividad, soy escéptico con la medicación y más partidario de la psicoterapia...
    También creo que para un veterano en esta senda de la salud mental uno acaba viéndose como un número impersonal... una especie de alma retratada en un simplista almanaque sobre trastornos...
    Acabó detectando apresuramiendo, tristeza de hastío, mansedumbre y cierto sadismo en la mayoría de psiquiatras y psicólogos..
    El capitalismo también hace su negocio con las penas vendiendo pastillas...
    Canalizare esa hiperactividad haciendo más deporte y me obligarte a ver una película diaria con atención...
    Anoche vi lunas de hiel de Polansky y me pareció soberbia, no a la altura del quimérico inquilino opino.
    Un abrazo decadente,

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    1. Todo lo que hablemos de fútbol es algo ya banal. Se gana más dinero en publicidad que en los partidos en sí. Son héroes nacionales, son ejemplos de servidumbre, chulería y analfabetismo. Pero no pasa nada. Estadios con casi cien mil personas vociferantes y millones en sus casas y los bares, el aglutinante social. No hay Dios, ni Familia, ni Estado que nos ayude, pero tenemos el fútbol. A mí me pone de los nervios. Siempre he dicho que algo que desactiva a tanta gente simultáneamente tiene algo de perverso.
      Y eso sin contar lo que ya hemos hablado del duopolio absurdo que acaba con la emoción de La Liga.

      He seguido la banda desde siempre. En realidad no me cae mal ninguno, no tengo esa inquina a Bunbury que tiene la mayoría por haberse cargado el grupo, de hecho me gustan varias cosas que ha hecho en solitario (su álbum pequeño cabaret ambulante es una joya), y me parece muy curioso que los demás, si tanto talento tenían, no hayan formado ninguna banda a posteriori. Luego me enteré de que habían operado a Valdivia de un problema en su mano, por lo que perdió bastante como guitarrista, y que a Pedro Andreu le operaron del corazón. Alan Boguslavsky si que se largó con Bunbury para el Radical Sonora y ha hecho alguna cosa por su cuenta en Latinoamérica. Pero hubiera sido muy sencillo buscar a otro vocalista después de un año o dos de descanso y seguir por dónde ellos querían, porque el problema aparte de la saturación de conciertos, era que Valdivia quería tirar por una esencia más cercana al hard rock y Bunbury quería hacer cosas diferentes. Y creo que ahí fue el fracaso general, porque si cada uno por su cuenta hubiera seguido adelante, pues mejor para el público, pero es que HDS también eran las letras de Bunbury. Bueno, ya han pasado más de veinte años, y aparte del reencuentro y los diez conciertos que dieron en España (me dejaron un pelín frío), no parece que quieran sacar nuevo disco ni material. Una pena.

      Y sí, el capitalismo siempre gana: causa las enfermedades (o las agrava) y luego te vende pastillas que solo amortiguan el problema durante un tiempo. Al final te convierten en un yonqui legal, es lamentable. Sí, creo que eso es lo mejor que puedes hacer: implicarte en hacer más deporte, en ver alguna película (Lunas de hiel es fantástica), Mens sāna in corpore sānō, seguir haciendo cosas que te estimulen. Buscar soluciones más en el interior que en el exterior. Con internet tienes todo: cine, música, series, libros, contacto social, noticias, charlas TED, yo creo que llevando hasta el final cierta exigencia intelectual puedes mantener mejor la lucidez que con el combo psicólogo-pastillas. Pero bueno, es un tema complejo.

      Me voy a trabajar. Un abrazo.

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  4. Yonquis legales que acuden a farmacia ilegal en el banco del parque conozco a alguno...
    Se regurcitan como los gatos con las plantas de la tiranía legal...
    Heroes del silencio es una banda que hasta llevo tatuada en el antebrazo, crecí con sus canciones, íbamos al parque cercano a la estación del silencio con el casete a pilas a hacer botellón y fumar porros cantando sus letras con los amigos...
    Pillabamos el punto en el parque para después echar unas cervezas en su bar...
    Para unos chavales de 17 años ver al bunbury en persona era la hostia, que un colega tuyo le pasase por intermediación del camarero una postura de 20 euros de chocolate un orgullo...
    Allí al fondo del bar en la oscuridad del escenario sentados en el sofá pasábamos tardes de sábado escuchando buena música...
    Y con el tiempo intimamos con pedro al que le guardo especial cariño, por la humanidad y sencillez que tiene, es un tío inteligentisimo...
    Luego más tarde me enteré de sus dolencias cardíacas...
    Tengo que decir que pase horas mágicas en la estación del silencio, ya no quedan ese tipo de garitos en la ciudad y si los hay tampoco lo se ya que apenas salgo últimamente...
    Bunbury parece más introvertido y tímido, de vez en cuando se dejaba ver por el bar entre gira y gira o cuando tocaba en Zaragoza...
    Era un lugar de peregrinación entre los fans de heroes y en alguna quedada tuve la suerte de intimar con alguna fan del grupo con la que acabé enrollandome...
    Una noche algo ebrio engañe a una chica de Valencia diciéndole que yo era primo hermano de bunbury y sin ponerlo en duda ni testigos de inmediato me busco los labios... Xddd
    Tambien en otra ocasión con una prostituta totalmente obsesionada con los héroes acabamos fumando unos canutos al fondo del bar y liados...
    Venía a fumar chocolate y beber jarras de cerveza antes de hacer barra americana de 7 a 3...
    Gratos recuerdos, héroes del silencio es casi imposible de imaginar sin Enrique...
    Quizá funcionase la idea en otro contexto que mejor no se dé...
    Como hicieron the doors tras la muerte del vocalista con otros imitadores exprimiendo la naranja...
    Grandes heroes, y la estación del silencio... lamento que mi idilio con ese antro mágico acabase tan mal... Sorry Antonio, mucha suerte

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